“Todas las mujeres son mis musas”. Ésta era una de las frases-ancla del creador y, por ello, fue la que se podía leer a la entrada de la exposición del Museo del Traje, que le rindió tributo hace cuatro años con la muestra Homenaje a Pedro del Hierro. Color, belleza y tiempo.  “A hombres como Pedro debemos agradecer habernos dado esa porción de belleza que tanta falta nos hace para vivir, pero también haber sido el origen, el cerebro y el corazón de una cadena de trabajo”, afirmó la ministra de cultura, Ángeles González Sinde, al presidir la inauguración.

Tenía 67 años de edad y, como todo gran couturier, imaginó que moriría haciendo vestidos. No fue así. En 2011 se retiró  debido a problemas cardiovasculares, y el pasado viernes 3 de abril, el Grupo Cortefiel, empresa a la que pertenece la firma que lleva su nombre, dio a conocer el fallecimiento de un hombre que logró ganarse el reconocimiento y el corazón de quienes lo conocieron. “Gracias por tantos momentos inolvidables vividos a tu lado. Descansa en paz mi querido Pedro”, escribió en su cuenta de Twitter Nieves Álvarez, una de sus cómplices irredentas.
Del Hierro presentó su primera colección en 1974 y, dos años más tarde, se convirtió en el miembro más joven de La Cámara de Alta Costura Española, con tan sólo 28 años de edad. Fue el primer diseñador español en introducir un corner de su propia marca en una cadena de tiendas departamentales, tras integrarse al Grupo Cortefiel en 1989. Su estilo visionario, creativo e innovador, lo convirtieron  en un referente de modernidad en España.

No fue hasta 2012 cuando se nombró a Carmen March como cabeza visible de la marca. March y su equipo han conseguido presentar sus colecciones en la semana de la moda de Nueva York, obteniendo el respaldo de la crítica y el público. Pedro del Hierro hizo de la moda española un estandarte y supo ver antes que nadie que el futuro de la industria dependía de la manera en que  se comercializaba, lo cual  llevó a su marca   a estar presente en más de 20 países. Se fue Pedro, “el grande”, y con él, la genialidad de un madrileño universal. Descanse en paz.