La iniciativa de Enrique Peña Nieto de reformas a la Constitución en materia energética que este día la Comisión Permanente del Congreso de la Unión turnará al Senado, ofrece que el Estado contará con capacidad presupuestal para combatir la pobreza extrema y el hambre.

En los beneficios que anota el Ejecutivo federal en el texto de la iniciativa expone que la inversión y los recursos fiscales que se obtengan "de concretarse las reformas propuestas", permitirán a México consolidar un modelo de hidrocarburos sostenible en el largo plazo.

Se propiciará una mayor integración en la cadena de valor, "que permitirá abasto suficiente de gasolinas, gas metano y gas licuado de petróleo a precios competitivos". Repercutirá, igualmente, "en tarifas eléctricas menos gravosas para los usuarios".

En su sesión de este miércoles, la Comisión Permanente pondrá en marcha el proceso legislativo de la reforma Energética que tendrá el Senado como cámara de origen y será enviada para su dictamen a las comisiones de Puntos Constitucionales, Energía y Estudios Legislativos Primera.

El proyecto del presidente Enrique Peña Nieto será estudiado junto con la iniciativa de Acción Nacional y la que presente el PRD la próxima semana, así como otras que figuren en archivos de comisiones y que tengan vigencia legislativa para ser incorporadas a la revisión.

El texto de Peña Nieto resalta que al detonar inversiones y producción, habrá crecimiento del PIB, sin exponer previsiones de aumento, al igual que en el empleo, y ello permitirá la obtención de recursos fiscales adicionales que se destinarán a rubros del desarrollo social.

Ofrece fortalecer el sistema de seguridad social "para abatir decididamente a la pobreza extrema y crear mecanismos de redistribución eficaces, combatiendo el hambre y mejorando los servicios de salud pública".

Los ingresos fiscales adicionales, expone Peña en la iniciativa, servirán para que los grupos más vulnerables tengan la oportunidad de desarrollarse, mejorar sus condiciones de vida y contribuir a la competitividad del país.

La educación de calidad y desarrollo de capacidades profesionales, serán impulsados con recursos del auge energético que espera Peña Nieto, "y nuestro país podrá aprovechar su bono demográfico y generar un número creciente de trabajadores de alta especialidad técnica".

Los recursos que genere el sector derivados de la reforma energética permitirán "invertir en infraestructura para generar un desarrollo incluyente y distribuido para alcanzar todos los rincones del país".

Aeropuertos, carreteras, caminos, serán construidos pensando en el bienestar y productividad de futuras generaciones, y "un enfoque federalista permitirá alcanzar los mejores resultados de inclusión y transmisión de los beneficios", expone el Ejecutivo federal.