Para el arzobispo de la arquidiócesis de Acapulco, Carlos Garfias Merlos, todavía hay tiempo para que el gobierno del estado, los grupos de autodefensa y el Ejército, puedan reiniciar el diálogo que eviten más violencia en la entidad, pero si están fuera de la ley, el desarme tendrá que ser de una forma pacífica.

En conferencia de prensa, el prelado insistió en que es importante que se siga buscando el diálogo entre la UPOEG, CRAC, y autodefensas ciudadanas, en razón que si con una coordinación adecuada entre los tres órdenes de gobierno, pueden estos grupos convertirse en un apoyo para las autoridades estatal, federal y municipal.

"El desarme vendrá a ser de una forma pacífica y tiene que encontrarse la manera para que sea en el diálogo y en el acuerdo de las partes, las policías comunitarias o lo grupos de policías ciudadana o los auxiliares como se le s vienen llamando, tienen que estar en coordinación con las autoridades con el acuerdo conjunto y el desarme de lo que ellos no pueden, o de armas que no pueden portar tendrá que hacerse de una forma pacífica" apuntó.

Lamentó la acción militar del pasado miércoles 27de este mes, cuando el Ejército Mexicano desarmó de manera involuntaria a mas de mil policías comunitarios en la región de la Costa Chica de Guerrero, y en donde, grupos de campesinos reclamaron que fueron objeto de golpes y que sus derechos humanos fueron violentados.

"Yo creo que están en el momento del diálogo, esta viéndose este desajuste en cuanto a que no han logrado a tener el acuerdo conveniente, pero será muy importante que se siga buscando el diálogo entre el gobierno del estado" apuntó.

Hizo un llamado a las partes confrontadas para que asuman actitudes responsables ante la sociedad y den pasos claros de buena voluntad, para generar un ambiente de entendimientos y de apego al derecho que ayude al diálogo y promueva la reconciliación para construir la paz.

cg