Julian Assange, el fundador de Wikileaks, aseguró en 2011 que las redes sociales son bases de datos prolíficas para el espionaje, lo que hoy toma relevancia en medio del caso de Edward Snowden, el ex analista de la CIA, acusado de filtrar información sobre ese tema.

"Facebook, en particular, es la más espantosa máquina de espionaje jamás inventada", dice contundente Julian Assange, el fundador de Wikileaks.

Assange, quien se encuentra refugiado en la embajada de Ecuador en el Reino Unido, abunda: "aquí tenemos una de las bases de datos más accesible, sobre la gente, sus relaciones, nombres, direcciones, y de todos sus parientes, todas al alcance de Estados Unidos, todas accesibles de la Inteligencia norteamericana".

Y ante esa maquinaria asegura que las revelaciones de Wikileaks son sólo "la punta del iceberg".

En una entrevista realizada en el 2011, Assange reflexionó sobre lo que sucedía antes del 2010, cuando surgieron las primeras filtraciones de Wikileaks, y se pregunta sobre el "enorme mundo escondido que está afuera, del que nosotros no sabemos nada. Eso existe ahora mismo".

Entrevistado para RT, Assange dijo en ese momento que "hay un verdadero cambio en algunas partes de Medio Oriente. Yo creo que Egipto es un ejemplo claro".

En ese momento, Egipto se encontraba en plena "primavera árabe", tras la caída de Hosni Mubarak y el ascenso de Mohamed Mursi, quien hace unas semanas fue derrocado en un golpe de Estado, junto con los Hermanos Musulmanes.

En una larga entrevista en la que Assange habló incluso sobre las diferencias que surgieron con The Guardian y The New York Times, diarios a los que dio los primeros cables en 2010.

"Lo que pasó es que no hay límites entre el interés estatal y el interés comercial", dijo Assange, quien sin embargo, aseguró que su enemigo número es la ignorancia.

"Y yo creo que es la enemiga número uno de todos, cuando no entiendes que está pasando en el mundo. Ahora, la pregunta es, ¿Quién promueve la ignorancia?", finaliza Assange.

cg