MOSCÚ (Agencias).— El presidente de Rusia, Vladimir Putin, responsabilizó ayer a EU de que Edward Snowden siga varado en el aeropuerto Sheremetievo de Moscú, pues “han intimidado tanto a otros países que nadie le quiere. Y de esa forma lo están bloqueando en nuestro territorio”.

El joven técnico de 30 años aterrizó en Moscú “sin invitación... Él no vino a nosotros, él estaba en tránsito con un boleto para ir a otro país... Fue un regalo, como en Navidad”, dijo el mandatario ruso, quien de nueva cuenta dejó claro que le gustaría desembarazarse del problema de Snowden. Al ser preguntado sobre qué es lo que va a pasar con el informático ahora respondió: “¿Y cómo lo voy a saber yo? Se trata de su vida, de su suerte”.

Putin señaló que la oferta de asilo para Snowden sigue en pie y él sabe las condiciones, que son dejar de filtrar información que perjudique a los países aliados.

“Las recientes comunicaciones parecen indicar que de alguna forma ha cambiado su posición. La situación final no se ha esclarecido hasta el momento”, precisó el jefe del Kremlin, quien ha rechazado categóricamente entregar a EU al informante.

Snowden dijo el viernes que iba a solicitar asilo en Rusia y con ello estaría aceptando las condiciones de Putin de no causar más daño a EU con sus revelaciones; sin embargo, ayer fuentes rusas reportaron que Snowden no ha entregado su solicitud de asilo a las autoridades.

La conocida activista de los derechos civiles Svetlana Gannushkina consideró “raro” que no haya sido presentada la solicitud de asilo, después de que el joven lo anunciara ante la prensa y defensores de derechos humanos el viernes en la capital rusa. “Comienza a parecer de alguna forma poco serio”, dijo la experta en cuestiones de refugiados.

“Es normal”

Por otro lado, el gobierno alemán calificó ayer de “normal” que sus servicios secretos cooperen “puntualmente” con los de EU, en relación con información publicada ayer por el diario Bild de que Alemania sabía del espionaje de EU e incluso compartió información obtenida a través del programa PRISM.

En este marco, la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) de Naciones Unidas (ONU) llamó ayer a negociar un “tratado de paz cibernético”.