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La defensa de Joaquín El Chapo Guzmán Loera inició su estrategia legal y presentó un amparo contra una eventual orden de extradición, luego de que autoridades de Estados Unidos anunciaron que pedirán su entrega para que enfrente las diversas acusaciones que existen en ese país, entre las que destaca la más reciente, que data de abril de 2012 en Texas, en la que se le imputan 14 cargos graves por conspiración, narcotráfico y homicidio, junto a otros 21 integrantes del cártel, incluyendo a su socio Ismael El Mayo Zambada.

El abogado penalista Xavier Olea, consultado por EL UNIVERSAL sobre este tema, indicó que es claro que con este amparo la defensa tratará de impedir la extradición, por lo que sería un proceso que se prevé largo y el juicio de garantías podría extenderse por lo menos dos años hasta llegar a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN); la única posibilidad de que fuera entregado a corto plazo a Estados Unidos es que Guzmán Loera se allanara a su entrega y pidiera él mismo ser procesado en esa nación, donde existen cargos en su contra en al menos seis estados.

Aunque Estados Unidos no ha formalizado petición alguna para que El Chapo sea extraditado a ese país, la Procuraduría General de la República (PGR) tiene en sus archivos una solicitud de 2001 —presentada por ese gobierno días antes de que el capo escapara del penal de Puente Grande, Jalisco—, pero ésta no fue ratificada en los 60 días de plazo que marca el tratado bilateral en la materia.

Por ello, autoridades de la PGR indicaron que el Departamento de Justicia estadounidense tendrá que presentar, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores, una nueva petición de detención formal con fines de extradición, que deberá incluir cada uno de los cargos que se le prevén fincar, y ninguno de ellos podrá contemplar un castigo extremo, como la pena de muerte.

Frente a este escenario jurídico, ayer la defensa de Guzmán Loera interpuso el juicio de amparo contra una posible orden de extradición en su contra a Estados Unidos; el recurso se presentó ante el Juzgado Octavo de Distrito en Materia de Amparo del Primer Circuito, y aún no se le ha asignado número, pues tendrá que ser ratificado por el abogado del ex líder del cártel de Sinaloa, Óscar Quirarte.

La defensa tiene un plazo de tres días hábiles para ratificar el amparo, a fin de que el juez de la causa se pronuncie y determine si admite o no el juicio de garantías. Aunque el penalista Xavier Olea advirtió que este amparo es muy probable que quede sin efectos, “en caso de que al momento en que el juez analice su procedencia no exista una petición formal de Estados Unidos para extraditar a El Chapo, si no hay dicha solicitud, jurídicamente el amparo queda sin materia, ya que el acto reclamado es inexistente”.

Aunque para el abogado es evidente que, si bien no es el momento procesal para presentar este amparo, la defensa de El Chapo deja el mensaje de que combatirá legalmente los intentos por extraditarlo, un procedimiento que es largo, y puede llegar hasta la SCJN, pues se tienen que agotar todos los procedimientos jurídicos que hay en el país antes de que la SRE ordene su entrega.

Estados como Nueva York, California e Illinois tienen causas abiertas contra Guzmán, la más reciente de abril de 2012 en Texas, donde la acusación criminal EP-12-CR que incluye a El Chapo y a El Mayo Zambada contempla 14 cargos graves.