Tras los ataques y enfrentamientos registrados en los últimos días en Michoacán, el gobernador interino, Jesús Reyna, confirmó el reforzamiento de la seguridad, con el arribo de más fuerzas federales al estado.

El mandatario estatal dijo en entrevista que además se ordenó el acuartelamiento de policías estatales para mantenerse atentos ante cualquier eventualidad.

Recalcó que aunque se han cumplido 36 horas sin que se registren hostilidades, la alerta se mantendrá durante todo el fin de semana, por lo que ya se giraron instrucciones para que se cancelen permisos, descansos o vacaciones entre el personal policiaco estatal.

Rechazó que esta estrategia forme parte de una segunda etapa del operativo de seguridad implementado por la federación desde mayo pasado, pues más bien es la respuesta a las acciones realizadas por la delincuencia organizada contra las fuerzas policiacas.

Reyna García manifestó su confianza en que el operativo de seguridad puesto en marcha rinda frutos en un corto lapso.

"Hay cosas que no se pueden comentar porque pudieran considerarse apreciaciones subjetivas, pero el tiempo nos va a dar la razón y ustedes van a ver como efectivamente el desarrollo que hoy realiza el gobierno estatal con el federal va a dar un buen resultado en beneficio de la sociedad michoacana", comentó.

Además, destacó la coordinación con las autoridades federales y estatales de las entidades vecinas, con quienes se ha mantenido en constante comunicación.

El gobernador interino de Michoacán reiteró que la violencia surgida en el estado está focalizada y no pone en riesgo la gobernabilidad de la entidad.

spb