El gobierno de Guerrero indicó que cuenta con la capacidad humana y la infraestructura necesaria para garantizar los servicios de salud a la población afectada por las inundaciones que causó la tormenta tropical Manuel, indicó la Secretaría de Salud estatal.

El subsecretario de Planeación, Pablo Zapién Cortés, dijo que toda la infraestructura hospitalaria de Guerrero se encuentra trabajando con toda normalidad, toda vez que reportó que las últimas lluvias no generaron mayores afectaciones en hospitales, clínicas y centros de salud de las siete regiones.

El funcionario comentó que los 14 hospitales generales, las cuatro unidades de alta especialidad, los dos hospitales de la Madre y El Niño Guerrerense, y los más de 100 centros de salud, se encuentran laborando con toda normalidad.

Zapién Cortés sostuvo que la Secretaría de Salud tiene sus propias medidas de prevención para evitar la propagación de brotes epidemiológicos en las zonas afectadas.

Señaló que no moverán de su centro de adscripción a ningún médico especialista, y para atender las contingencias que se presenten en zonas afectadas se usarán a los médicos generales y de las 110 unidades móviles de salud, una vez que sean habilitados los caminos y carreteras afectadas por las precipitaciones.

Informó que los gobiernos de Puebla, Morelos, Guanajuato y el Estado de México, enviaron a Guerrero personal médico para reforzar las brigadas de salubridad que se han implementado en las zonas inundadas y devastadas por las lluvias.

Añadió que el gobierno del estado priorizó las medidas para prevenir la propagación del dengue, por lo que reforzó las acciones de nebulización en los 59 municipios afectados por Manuel, además solicitó la colaboración de la población con la limpieza de sus hogares libres de cacharros.

El funcionario informó que este martes fueron reabiertas las instalaciones del Hospital de la Madre y el Niño Guerrerense, el cual fue evacuado el lunes 16 de septiembre debido al riesgo que significó el desbordamiento del río Huacapa.

"Se evacuó por precaución, porque el cúmulo de agua era demasiado y nadie podía garantizarnos que el agua socavara y afectara el inmueble, poniendo en riesgo al personal a los usuarios que había en ese momento" apuntó.

Indicó que después de conocer el dictamen oficial de Protección Civil, donde se establece que no hay daños estructurales en este nosocomio exclusivo para atender partos de alto riesgo, se determinó regresar a los 16 bebés y a sus madres, quienes habían sido trasladados al Hospital General de Chilpancingo.

jlr