El Parlamento iraquí aprobó en la noche del lunes un nuevo gobierno encabezado por Haider al-Abadi como primer ministro.

Al frente del Ministerio del Petróleo fue nombrado Adel Abdel Mehdi, del Consejo Supremo Islámico, mientras que el ex primer ministro Ibrahim Jafaari estará al frente del Ministerio de Relaciones Exteriores.

Los cargos de ministro de Interior y de Defensa quedaron vacantes, pero Abadi se comprometió a hacer los nombramientos en el plazo de una semana.

El gobierno iraquí enfrenta a múltiples crisis, en especial la conquista de zonas suníes por parte de combatientes del Estado Islámico y otros grupos armados.

El Parlamento aprobó para los cargos de vicepresidentes al ex primer ministro Nuri al-Maliki, de confesión chií; al político suní Usama al-Nujaifi -ex presidente del Parlamento-; y a Iyad Allawi, un chií secular que también fue primer ministro.

Maliki fue primer ministro durante ocho años y combatió hasta el último momento para obtener un tercer mandato.

Se retiró de la contienda en agosto, acosado por la intensa presión de los bloques políticos de suníes, chiíes y kurdos, junto con la de Irán y Estados Unidos.

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