El Gobierno de Hong Kong instó hoy a los organizadores de las protestas prodemocráticas a persuadir a sus integrantes de que se dispersen cuanto antes, después de que fueran atacados por grupos contrarios en varios puntos de la ciudad ocupados por el movimiento.

En un comunicado, el Ejecutivo llamó a la "calma" a ambos bandos y urgió a la gente que apoya el movimiento de protesta a seguir el consejo de la Policía e "irse cuanto antes, por su propia seguridad, con la protección de la Policía" .

La gente que se opone a la manifestación también "debe cooperar" , dijo el Ejecutivo, que alabó la actuación policial y aseguró que ésta evidencia que no toman un bando político en este conflicto.

El comunicado se hizo público después de los ataques registrados en dos zonas ocupadas, en Causeway Bay, popular entre los turistas chinos del continente, y en la zona de Mong Kok, uno de los barrios con mayor densidad de población del país y con una alta actividad comercial.

En este último barrio, se vivieron los momentos más tensos del día después de que cerca de un millar de personas acorralaran a apenas un centenar de estudiantes para exigirles que dejen las calles libres y devuelvan la normalidad al área.

La Policía trató de contener a los ciudadanos que pretendían asaltar la zona donde los estudiantes están acampados desde el pasado sábado.

El área de los jóvenes que, con sus protestas, demandan democracia llegó a quedar reducida a apenas 20 metros cuadrados, hasta que más manifestantes acudieron en su ayuda desde otros puntos de la ciudad y retomaron una zona más grande.

Las organizaciones que lideran el movimiento civil denominado popularmente como la "revolución de los paraguas" -Occupy Central, la Federación de Estudiantes de Hong Kong y Scholarism- advirtieron en un comunicado conjunto al Gobierno de Hong Kong de que intervenga para frenar el acoso a los manifestantes o cancelarán el diálogo acordado esta madrugada entre ambas partes.

La sexta jornada de manifestaciones amaneció con menos integrantes que en días anteriores, horas después de que el jefe del Ejecutivo de Hong Kong, Leung Chun-ying, abriera la vía del diálogo para buscar una solución.
Los incidentes de hoy ponen en jaque la celebración del diálogo, cuya fecha aún no se ha decidido.

cg