Toma la CNTE Reforma
Video. Habitantes de la ciudad de México, pese a estar en favor de la libertad de expresión, se sienten agredidos y afectados por las movilizaciones de la CNTE, por lo que hubieran preferido estuvieran en el Zócalo
MANIFESTANTES. Poco después de la medianoche, tras las negociaciones con autoridades federales y locales, los maestros levantaban suscasas de campaña con el compromiso de que la vialidad quedaría completamente libre a las 06:00 horas. (Foto: YADIN XOLALPA. EL UNIVERSAL )
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La ciudad de México vivió uno de los días más caóticos en lo que va del año, debido a que cerca de 5 mil maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), provenientes de Oaxaca, instalaron su plantón sobre la avenida Reforma, de Insurgentes a Juárez, generando serias afectaciones en la movilidad de la capital y millonarias pérdidas económicas en los distintos comercios ubicados en esta zona.
Después de más de 12 horas de tomar Paseo de la Reforma, los maestros comenzaron a levantar las casas de campaña y la administración capitalina informó que el plazo para que dejaran libre la vialidad eran las 04:30 horas, a fin de que se abriera al paso vehicular a las 06:00 horas de este martes.
Las demandas magisteriales van desde la exigencia del pago de aguinaldos y salarios a más de 6 mil profesores, su rechazo a la Reforma Educativa y la liberación de los presos políticos.
Como no ocurría desde hace más de siete años —desde el plantón de López Obrador—, Reforma se copó de más de 2 mil 700 casas de campaña y 350 lonas que albergaron a los mentores, pues desde temprano las autoridades locales montaron un cerco policiaco en las inmediaciones del Zócalo, donde los procedentes del sur del país planeaban montar un campamento.
La caravana magisterial arribó alrededor de las 08:00 horas al DF y la conformaban alrededor de 50 autobuses de diversas líneas, mismos que fueron escoltados por un grupo de motopatrulleros desde la calzada Ignacio Zaragoza hasta las inmediaciones del Monumento a la Revolución.
El secretario de Gobierno, Héctor Serrano, dijo a EL UNIVERSAL que no permitirán que la disidencia magisterial vuelva a tomar la Plaza de la Constitución y que el plantón sobre Reforma fue una decisión unilateral. Destacó que no hay mesas de negociación con el GDF, porque no es la instancia que pueda resolver sus demandas.
Sobre el cerco al Zócalo, manifestó que se mantendrá el tiempo necesario. Sobre los principales accesos al primer cuadro de la ciudad se montaron grupos de granaderos que pedían identificación a las personas y que justificaran el motivo de su visita.
Para las 12:00 horas los maestros comenzaron a instalar su campamento sobre Reforma, sin que ninguna autoridad se lo impidiera.
Molestias. Los servicios de transporte público, como el Metrobús en las líneas 1 y 4, se vieron interrumpidos por lo que se observó a los usuarios tener que caminar para llegar a destino.
Personal de Tránsito de la Secretaría de Seguridad Pública local hacía lo posible para agilizar el tráfico en las inmediaciones de la Plaza de la Revolución y vialidades que confluyen a este tramo de Reforma; pero su labor resultó infructuosa ya que el caos inundó las colonias Cuauhtémoc y Centro.
De acuerdo con organismos empresariales, en este primer día de plantón sobre Reforma los comercios reportaron pérdidas por 10 millones de pesos y la afectación general fue a un total de 26 mil establecimientos.
Gerardo López, presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño (Canacope) demandó a las autoridades aplicar la Ley de Movilidad para garantizar el libre tránsito de los capitalinos.
A las 17:00 horas las autoridades locales lanzaron un ultimátum a los maestros, pues les daba de plazo dos horas más para quitar su plantón o serían retirados por la fuerza pública.
Una hora más tarde se observó a diversas agrupaciones de granaderos de la Secretaría de Seguridad Pública en las inmediaciones del plantón: algunos profesores comenzaron a recoger sus casas de campañas, mientras que otros se unieron de brazos y advirtieron que no dejarían pasar a los uniformados.
El tiempo se cumplió y el gobierno local les dio otro plazo para que se retiraran, las negociaciones continuarían con la Secretaría de Gobernación.