Estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa, respaldados por egresados de las nueve normales públicas de Guerrero tomaron radiofusoras de Chilpancingo, para exigir la presentación con vida de sus 43 compañeros y advertir que no descansarán hasta que los presenten con vida.

En "Capital Máxima" los normalistas se apoderaron de los micrófonos por unos 15 minutos, cubiertos del rostro la mayoría; uno de ellos dijo que le daba seis días al presidente del país, Enrique Peña Nieto, para que renunciara a su cargo, pues no ha sido capaz de garantizar la seguridad que requiere México.

Pidieron la liberación de los detenidos en los disturbios del 20 de noviembre -once personas, ocho hombres y tres mujeres-, que fueron trasladadas a la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) por los hechos de ese jueves, y quienes fueron llevados a penales federales en Nayarit y Veracruz.

El normalista que habló del tema aseguró "que son gente que al igual que nosotros está indignada por los sucesos del 26 de septiembre y no se vale que el gobierno la reprima".

En entrevista, un estudiante encapuchado advirtió que ven muy fuerte la posibilidad de que soliciten apoyo a las policías comunitarias de la entidad, para que sus integrantes busquen junto a ellos armados a los 43 estudiantes rurales que están desaparecidos, desde hace prácticamente ya dos meses.

Y adelantó que no cesarán en su demanda de justicia, así tengan que ser radicales sus acciones, como las que han realizado en los últimos días: quemas de edificios públicos y vehículos.

ams