El dueño del salón de espectáculos Copacabana, ubicado en Acapulco, Guerrero, Carlos Reyna Galeana, apareció ante los medios tras el incendio de su negocio en plena cena de fin de año hace una semana.

El empresario afirmó que las causas del siniestro fue el desplome de un globo de cantoya en la parte sur de la palapa de su negocio.

"Me quedé con lo que traigo puesto, más 600 pesos que traía yo en mi cartera en ese momento. Todo, todo se perdió. Es una cabaña de 900 metros cuadrados y en menos de 10 minutos ya todo había acabado, ya estaba todo perdido. Obviamente me dolió mucho. Gracias a Dios no pasó a mayores, no hubo lesionados ni quemados", relató.

Recordó que alrededor de las 10:30 horas un globo de cantoya encendido se acopló en la parte sur del techo de su negocio, y sus empleados al percatarse del incendio empezaron a evacuar a unas 20 personas que se encontraban en el interior del local.

Acompañado por su equipo de asesores jurídicos, señaló que tuvo una pérdida de 6 millones de pesos porque su negocio quedó hecho cenizas, situación que lamenta más porque no tenía seguro, ya que ninguna empresa los ofrece a negocios que son construidos con palapas.

Reyna Galeana acusó a las autoridades municipales de no advertir sobre los riesgos del uso de estos globos como el año anterior.

Recordó que en 2012 personal de Protección Civil y Bomberos acudió a los negocios de palapas con pipas de agua dos días antes para mantener mojados los techos como medida preventiva en caso de que aterrizará un globo de cantoya encendido.

NO HE PAGADO A LOS CLIENTES AFECTADOS

Reconoció que no ha reembolsado nada a los turistas que perdieron su entrada previamente pagada para la cena-show, pero dijo estar enterado de que el gobierno municipal y el estatal hicieron lo propio para indemnizar a sus clientes afectados.

Además se dijo damnificado, por lo que pidió el apoyo del gobierno para poder recuperar su capital de 6 millones de pesos.

Adelantó que nuevamente levantará su restaurante y podrá pagar las deudas y recompensar a sus clientes para que regresen a Acapulco y, sobre todo, confíen en el restaurante Copacabana.

En conferencia de prensa en un restaurante de la zona turística de la ciudad, el empresario aseguró que este martes le será entregado el peritaje que hicieran el pasado viernes 3 de enero especialistas de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) de Guerrero, de la subsecretaría de Protección Civil estatal y de Protección Civil-Bomberos de Acapulco.

Aseguró que a raíz de la destrucción de su negocio se quedó "sin nada", motivo por el cual no tiene para indemnizar a los turistas que pagaron mil pesos de entrada por adulto y 500 pesos por niño para disfrutar de la cena-show que daría en el restaurante Copacabana para recibir el 2014.

Carlos Reyna dijo que desde la zona de su establecimiento hasta el hotel Emporio (unos tres kilómetros de playa en el sentido Centro-Base), logró recabar 43 firmas de empresarios que tienen sus negocios construidos con techo de palapa, porque coincidieron en que ninguna autoridad les alertó sobre las medidas de seguridad que tenían que implementar para prevenir incendios por los 20 mil globos de cantoya que serían lanzados al aire.

"En cada uno de los restaurantes me firmaron un oficio que les vamos a dirigir a las autoridades de Protección Civil (...) aquí están todos los que me firmaron, tengo 43 (firmas) que reuní en el mediodía. Firmaron de que no les avisaron", y reconoció que dos negocios se negaron a firmar porque las autoridades si pasaron a avisar sobre las medidas preventivas.

jlr