Alud los sorprende cuando celebraban la Independencia
Video. Mientras festejaban el Grito de Independencia una avalancha de lodo sepultó 80 por ciento de La Pintada, una de decenas de localidades con deslaves por tormenta Manuel
TRAGEDIA. El desastre de La Pintada tiene dimensiones colosales. El alud dejó cientos de toneladas de lodo encima de casi la totalidad del pueblo. (Foto: Valente Rosas / EL UNIVERSAL )
Sólo escucharon un trueno y en segundos la avalancha de lodo sepultó más del 80 por ciento de esta población. Enterrados se calcula que quedaron casi 80 personas de unas 300 que aquí vivían. Este es el peor desastre que ha dejado el paso de la tormenta tropical "Manuel" por este estado y el que más vidas ha cobrado.
Sin embargo, el desastre de La Pintada no es el único. Las intensas lluvias de los últimos días han dejado cientos de deslaves en lo alto de la sierra de la Costa Grande y la Costa Chica de Guerrero, afectando una gran cantidad de pueblos y pequeñas comunidades serranas que se encuentran incomunicadas aún, y se desconoce el número de muertos y de heridos en una de las peores emergencias que ha enfrentado el estado por una contingencia ambiental.
El desastre de La Pintada tiene dimensiones colosales. El alud dejó cientos de toneladas de lodo encima de casi la totalidad del pueblo por lo que los trabajos que realizan las autoridades federales, estatales y municipales en el lugar ya no son de rescate, sólo de evacuación de los sobrevivientes y remoción de escombros, así como de resguardo del lugar por la peligrosidad que existe de otro deslave.
Enclavado en lo alto de la sierra, el poblado de La Pintada es parte del municipio de Atoyac de Álvarez y se encuentra prácticamente incomunicado. Sólo se puede llegar por helicóptero en los breves minutos cuando las condiciones del clima lo permiten y la otra manera es llegar a pie. Desde la cabecera municipal a La Pintada son 48 kilómetros de distancia. Sin embargo la carretera presenta más de 40 deslaves y una gran parte del trayecto hay que realizarlo a pie.
Eran las 15:40 horas del pasado lunes 16 de septiembre cuando el alud sepultó al pueblo. Celebraban una comida por el Día de la Independencia ya que la noche del 15 de Septiembre las fuertes lluvias y la crecida de los ríos habían mantenido en alerta a sus pobladores. Pero esa tarde la lluvia había descendido y el peligro parecía que había pasado por lo que se reunieron en el centro del pueblo a celebrar, cuando sólo se escuchó la explosión y todo quedó sepultado en segundos.
Del centro del pueblo sólo se salvó el quiosco y una parte del jardín central, todo lo demás está sepultado. Por entre la cima del lodo se pueden ver estructuras de concreto, lo que fueron los techos de las casas, en las orillas se ven llantas de camionetas y carros sepultados. El olor a muerte llega ya a varios metros de la zona siniestrada a cinco días de ocurrida la tragedia.
En la zona trabajan 210 elementos del Ejército, 20 de la Marina Armada de México, 8 de Protección Civil federal y 10 de Seguridad Pública de Atoyac, quienes prácticamente sólo dan resguardo a las casas que no fueron afectadas y realizan rondines de seguridad y evacuan a los pocos pobladores que quedan en este pueblo, que luce solitarios y con calles sólo llenas de perros, gansos, patos, caballos, burros y gallinas, los animales que la gente abandonó en su huida y que deambulan por las calles enlodadas del lugar.
En un recorrido realizado por el equipo de EL UNIVERSAL a pie desde Atoyac de Álvarez hasta este punto siniestrado, se pudo constatar la magnitud del desastre en la sierra de Guerrero. La crecida de los ríos arrasó casas, autos y ganado. Los deslaves en la zona son numerosos y constantes por lo que la carretera está prácticamente trozada cada cierto número de kilómetros.
El Paraíso también fue destrozado
Para subir a La Pintada se debe llegar a la comunidad de El Paraíso, es la más grande de estos poblados en lo alto de la sierra norte de Guerrero, es el que tiene más comercios y más infraestructura. Aquí las lluvias crecieron el río que provocó un alud de lodo, troncos y piedras que dejó varias calles de la comunidad sepultadas.
Hasta El Paraíso llegan miles de habitantes de poblaciones cercanas, entre ellas los habitantes que sobrevivieron al alud en La Pinta, por lo que esta población también está en emergencia. Aquí escasea el agua, la comida, los víveres, la ropa, los zapatos y las medicinas. La poca ayuda que llega es por helicóptero, así como la evacuación de heridos y personas enfermas.
Pero a El Paraíso no sólo llega gente de La Pintada, llegan de El Edén, el Tejamanil y el Campo Morado, otras comunidades a las que sólo se puede llegar por tierra y cuyos habitantes aseguran también fueron arrasadas por los deslaves.
El Paraíso se ha convertido en una especie de refugio para la zona serrana, sin embargo sus habitantes están desesperados, pues desde el sábado por la noche aquí ya no hay luz eléctrica, no hay teléfono y con las carreteras cortadas ya hay un severo desabasto de agua y alimentos.
Aunque la situación de desabasto se extiende por toda la Costa Grande, incluso en Atoyac de Álvarez, ya que la carretera Acapulco-Zihuatanejo esta trozada con la caída del puente en Coyuca de Benítez y otras estructuras hacia el norte cercanas a Ixtapa Zihuatanejo.
Ante lo intransitable la poca ayuda que llega a esta región es por helicóptero, sin embargo, en la zona continúan las lluvias y hay intensos nublados que imposibilitan la visibilidad de los vuelos de rescate y de ayuda. Desde el aire se observa la magnitud de la emergencia, en las laderas verdes de los cerros contrastan los deslaves de tierra y se miran sólo algunos techos de poblaciones que han sido afectadas.
spb