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El área de Servicios Digitales de la empresa Olabuenaga Chemistri, presidida por la publicista Ana María Olabuenaga, creadora del slogan “Soy totalmente Palacio”, fue contratada por adjudicación directa de marzo a diciembre de 2011 por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes para analizar la “vulnerabilidad de los aplicativos web de conaculta.gob.mx y mexicoescultura.com” (blindaje contra ataques cibernéticos, por un monto de 2 millones 212 mil pesos. La cifra equivale a 245 mil 777 pesos mensuales, es decir, 111 mil pesos más del sueldo mensual de Consuelo Sáizar, entonces presidenta del Conaculta.

Esa cifra resalta aún más si se considera la estrecha relación de Sáizar y la publicista. En noviembre de 2012 Sáizar ofreció una entrevista a la revista Gatopardo en la que habló de su gestión y de sus amistades. Para ella, Olabuenaga es una “hermana”, según la definió.

Personas identificadas por su amistad con Sáizar también fueron contratadas por adjudicación directa en distintas áreas del Conaculta, para servicios como “asesoría en comunicación interna”, “análisis” y documentación fotográfica de los “eventos más relevantes del Conaculta”, por sumas que van de los 645 mil pesos a los 2 millones.

Viejas amistades

Gatopardo publicó el artículo “La licenciada Sáizar”, de Guillermo Sánchez, cuyo objetivo era responder a la pregunta de cómo la ex funcionaria llegó hasta la “cúspide del mundo cultural mexicano dominado por hombres”.

Para el artículo se entrevistó también a personas que contaron cómo eran cercanas a la funcionaria. Una de ellas fue Lorena Elizabeth Hernández, promotora y relacionista pública, directora de la agencia Se habla español.

Un mes después de que Sáizar llegó al cargo, Hernández recibió un contrato por adjudicación directa por 293 mil 550 para que de abril a junio de 2009 ofreciera un “curso de entrenamiento de medios para voceros y desarrollo de mensajes clave para funcionarios del Conaculta”. De agosto a diciembre de 2009 firmó otro contrato por adjudicación directa por 645 mil 50 pesos para “fortalecer la imagen” del Conaculta en la prensa nacional.

En total, Hernández recibió 938 mil 550 pesos en 2009.

Otra persona que figuró en el artículo fue el editor Braulio Peralta, quien, según contó él mismo, conoció a Sáizar en su juventud cuando se reunían con Carlos Monsiváis.

El editor fue motivo de una solicitud de información al IFAI en noviembre de 2012. El solicitante pidió un informe detallado de todos los contratos celebrados entre Conaculta y Braulio Peralta.

La respuesta del IFAI fue que firmó cuatro contratos para el Cenart, Dirección General de Publicaciones y Centro Cultural Helénico.

El contrato del Cenart fue por adjudicación directa, celebrado de enero a diciembre de 2012 por un millón 268 mil 76 pesos.

El concepto fue definido así: “Realizar análisis de contenidos de las publicaciones, textos o información emitidos por medios de difusión y comunicación masivos”, así como para consolidar el proceso de comunicación interinstitucional y fortalecer ejes del “Proyecto Cultural del Siglo XXI”, lema de la administración de Sáizar.

Entre las personas que fueron contratadas por “asesoría en comunicación interna” fue la comunicóloga Gabriela Warkentin. El contrato establece que fue por adjudicación directa y que de mayo a diciembre de 2010 recibió 856 mil 615 pesos, que significan 122 mil 373 pesos mensuales.

La prensa registró que Warkentin ofreció al menos una conferencia en Colima a periodistas, promotores culturales y comunicadores, sobre el uso de redes sociales, además fue presentada como asesora de la presidencia del Conaculta.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Warkentin explicó que su trabajo fue hacer “la reingeniería de todas las redes sociales y la comunicación digital” y asesoría “en la parte digital”. “Se trabajó con todas las direcciones de Conaculta, incluso con algunas de las dependencias de cultura de los estados”.

Warkentin refirió que la invitación la recibió de Sáizar porque es experta en el tema y porque estaba trabajando en la Universidad Iberoamericana en temas de redes sociales.

Comunicación Social fue fortalecida en distintas áreas, una de ellas fue en la parte de documentación fotográfica. Por adjudicación directa se contrató a Carlos Sebastián Cisneros para que “asesora” y asistiera a tomar imágenes de los eventos “más relevantes del Conaculta”. Algunos de estos eventos, según testigos, eran comidas que Sáizar ofreció en la Ciudadela para informar los avances de la obra “La Ciudad de los Libros”. Por adjudicación directa, Cisneros recibió 175 mil 392 de enero a diciembre de 2012.