Jorge Luis Tinoco Muñoz, el camillero que falleció esta mañana a causa de las graves heridas que sufrió tras la explosión en el Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa, era un joven de 27 años, y que en su trabajo procuraba "regalar sonrisas" como lo hizo el pasado 6 de enero al convertirse en un Rey Mago para entregar juguetes en el Hospital Pediátrico Moctezuma.

Con el mensaje "Gracias ... por ayudarnos a regalar sonrisas a los niños con cáncer el Día de Reyes, con esto nuevamente intentamos fomentar el amor por los niños y las tradiciones", demuestra el compromiso con el que desempeñaba su trabajo.

El Tinoco Muñoz tenía "tan buen corazón", como lo describen sus amigos en Facebook, que no sólo se disfrazó de Rey Mago o payaso para alegrar a los pequeños internados en distintos hospitales, además alimentaba y se encariñaba con ellos "Este niño es una muestra de existe gente buena en el mundo y tengo el gusto de ser parte de esa gran equipo de trabajo que día y noche cuidamos de él, no sólo como paciente, sino le dimos amor y cariño. Se lleva una parte de nosotros, una muestra de que el amor es real", expresó.

Con quemaduras en el 97% de su cuerpo, sufridas al no querer abandonar el hospital por ayudar a un paciente, el día de hoy Jorge Luis perdió la batalla y falleció por la mañana.

Entre sus gustos destacan su afición al Real Madrid y al Manchester United, a las series como American Horror Story, la asistencia a la tradicional marcha zombie en el Distrito Federal y resalta los mensajes que se difundió en imágenes que a través de la red social donde se lee "En realidad usted fue siempre una imagen, la imagen que yo esperé a partir de un conjunto de anhelos de deseos incumplidos, de pequeños fracasos".

ahc