En el marco de la Cruzada Nacional Contra el Hambre, la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) firmó convenios con 20 instituciones de educación superior del país, por lo que más de 40 mil universitarios prestan su servicio social en municipios en pobreza extrema alimentaria.

En un comunicado, la Sedesol informó que en estas tareas participan estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), del Instituto Politécnico Nacional (IPN), la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y el Instituto Tecnológico de Monterrey (Tec de Monterrey), entre otras instituciones.

Precisó que los prestadores de servicio social visitan casa por casa, organizan las asambleas comunitarias, impulsan proyectos productivos en las localidades y realizan trabajo comunitario para mejorar la calidad de vida de las familias que habitan donde se encuentran los mexicanos más pobres.

"Nos debe mover que el 80% de los mexicanos que hablan otra lengua y tienen otra cultura sean víctimas de la pobreza y la discriminación", aseguró la titular de Sedesol, Rosario Robles Berlanga.

"Enfrentar estos desafíos requiere de alianzas entre instituciones académicas, cuya aportación resulta de vital importancia", expuso la funcionaria federal.

De esta forma, los convenios de Sedesol con institutos y universidades buscan incentivar la prestación del servicio social comunitario, la docencia y el impulso a programas de investigación en proyectos educativos, productivos, alimentarios, de desarrollo, gestión, infraestructura productiva y salud.

Todo ello, en los 400 municipios considerados en la primera etapa de la Cruzada Nacional Contra el Hambre, aseveró la dependencia federal.

En Tuxtla Gutiérrez, el delegado de la Sedesol en Chiapas, Eduardo Francisco Zenteno Núñez, y los directores de los Tecnológicos de Tuxtla Gutiérrez, Tapachula, Comitán y Frontera Comalapa, firmaron un convenio de coordinación para apoyar proyectos productivos en comunidades indígenas.

Zenteno Núñez señaló que la instrucción de Robles Berlanga, es promover la vinculación con los universitarios y académicos para aprovechar su potencial humano y profesional, así como sus conocimientos y experiencia en cada una de las acciones para enfrentar la pobreza.

jlr