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Las calificadoras estadounidenses Standard and Poor’s y Fitch Ratings advirtieron desde hace varios años sobre los riesgos e irregularidades financieras que había con la empresa Oceanografía.

Entrevistado luego de participar en la novena cumbre financiera organizada por LatinFinance, el director general y líder analítico para América Latina de Standard and Poor’s, Eduardo Uribe, informó que en 2010 le retiraron la calificación a Oceanografía por la falta de información que proporcionaba.

“La calificación la retiramos en 2010. Sacamos un comunicado de prensa diciendo que retirábamos la calificación por falta de información”, comentó Eduardo Uribe.

Al distribuirlo públicamente en la bolsa nosotros no teníamos que llamar a nadie en específico y asumimos que todo mundo la estaba viendo”, afirmó.

Añadió que para los acreedores de esta empresa, ahora envuelta en un fraude millonario, el retiro de la calificación era una advertencia.

Uribe comentó que el retiro de la calificación se dio una vez que la empresa dejó de proporcionar información financiera y operativa, es decir, todos los datos relacionados con sus estados financieros.

Antes de que les fuera retirada la calificación, Oceanografía tenía una nota Ccc, lo cual indica que se trata de un ente con una muy alta probabilidad de incumplimiento de pago.

Uribe dijo que la baja calificación era producto de un alto apalancamiento financiero, mucha deuda y un sólo cliente.

“También había ciertos riesgos en su operación, tenían un par de barcos, así que si se descomponía uno no podía dar servicios o problemas de huelgas que ponían en peligro su operación”, abundó.

Sobre Banamex, el experto mencionó que tiene un capital bastante sólido para absorber la pérdida.

Por separado, el director senior de calificaciones corporativas de Fitch, Sergio Rodríguez, explicó que retiraron la calificación desde hace cinco años, pues se trataba de una empresa “muy apalancada”.

“La calificación (de Oceanografía) desde un principio fue muy baja, empezamos en niveles de B y terminamos en Ccc, lo que seguía era el default. De ahí en adelante ya no seguimos la compañía.

“Son niveles de calificación bajos, porque trae un grado de apalancamiento muy alto; la empresa prestaba servicios a Pemex, y lo que hace ahora la paraestatal es que pide cierto nivel de calificación para participar en licitaciones”, mencionó.

Por su parte, el estratega de mercados emergentes de BlackRock, Gerardo Rodríguez, expuso que la situación de la naviera Oceanografía debe ser usada por el gobierno federal como un caso de transparencia certidumbre, factibilidad y acción decidida contra las malas prácticas.

“Creo que el momento en que sucede esto y la acción decidida del gobierno se puede interpretar como una señal de lo que se viene en un entorno de apertura sin precedentes en el sector energético”, informó el ex subsecretario de Hacienda y Crédito Público.

Calificación a Banamex, en riesgo

Por otro lado, Standard and Poor’s dio a conocer en un comunicado su postura respecto al evento del fraude con Banamex, donde establece que de encontrase nuevos eventos de este tipo dentro del banco o mayores afectaciones a las utilidades, podían bajar la calificación de la institución bancaria.

“Una baja significativa de las calificaciones de Banamex podría ocurrir si la posición de riesgo del banco se debilitara debido a más problemas de administración de riegos, y/o a un deterioro significativo en los indicadores de calidad de activos, derivados de una inadecuada implementación de estándares de originación más estrictos, o si los resultados netos bajan de manera abrupta, y esto debilita su índice de rentabilidad”, señaló la calificadora.

Standard and Poor’s confirmó para el banco, las calificaciones de crédito de contraparte de largo y de corto plazo en escala global de BBB+ y A-2, respectivamente, con una perspectiva “estable”.

Si bien S&P mencionó que en este momento es poco probable que disminuya la calificación de Banamex, también reconoce que el presunto fraude relacionado con Oceanografía refleja problemas en la administración de riesgos de la institución financiera que podrían debilitar su posición de riesgo.

“Sin embargo, consideramos que las prácticas generales de originación siguen siendo adecuadas y que ha tomado medidas correctivas para gestionar su negocio de factoraje mediante el fortalecimiento de sus estándares de monitoreo y control”, agregó la empresa evaluadora Standard and Poor’s.