Raúl Rodríguez, vicepresidente de enlace legislativo en la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), manifestó su descontento ante la iniciativa de reforma hacendaria.

Aseguró que los gravámenes relacionados con los impuestos verdes entre ellos al carbono y combustibles fósiles, desde la perspectiva industrial, son un tema muy delicado pues generan un retroceso y no estimulan el desarrollo económico del país, "son impuestos recaudatorios que van en contra sentido de lo que plantea el Plan de Desarrollo", enfatizó.

El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Gerardo Gutiérrez Candiani, reveló que el impuesto al carbono implicaría un incremento en las tarifas eléctricas de al menos 4% para la planta productiva.

Por lo que este impuesto pondría a discusión la reforma energética ya que le pegaría a Petróleos Mexicanos (Pemex) y Comisión Federal de Electricidad (CFE), que sin duda deberán aportar al Fisco por emitir gases, y esto repercutiría en la economía de las familias mexicanas ya que se generaría un incremento en el costo de la energía eléctrica.
Rodríguez abundó que la iniciativa como la plantea el Ejecutivo no brinda ningún incentivo a las empresas, por lo que encarecerá el proceso productivo, limitando las inversiones y competitividad del país.

"Si pasará la iniciativa como está planteada, automáticamente, solo en la parte de energía eléctrica tendríamos un incremento "parejo, lineal e inmediato" del 5% en los costos", reveló.

Es cosa sería, expresó, pues para el sector de la construcción y su cadena de valor esta afectación pegaría en más de cinco mil millones de pesos, y no es beneficio para nadie.

El Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi), el sector de la construcción utiliza insumos provenientes de otras industrias como el acero, hierro, cemento, arena, cal, madera, aluminio. Se le considera como uno de los principales motores de la economía del país ya que beneficia a 66 ramas de actividad a nivel nacional.

De acuerdo con el Inegi en México este sector aumentó su fase recesiva al cierre de junio y provocó que el PIB Industrial tuviera un débil crecimiento de 0.3% en el segundo trimestre a tasa anual, y acumuló tres trimestres consecutivos a la baja, de marzo a junio registró un retroceso de 2.7%.

El vicepresidente de enlace legislativo de la Canacintra le recordó a las autoridades que en México para elevar la competitividad se deberá apoyar a las empresas formalmente establecidas, con estos impuestos pasa todo lo contrario.

tcm