Damnificados por la tormenta tropical 'Manuel', marcharon este jueves por las principales avenidas de esta capital y protestaron frente a la residencia oficial Casa Guerrero, para exigir la pronta liberación de los apoyos que ofrecieron los gobiernos federal y estatal el pasado mes de septiembre.

Con pancartas en mano, más de 300 personas de al menos 20 colonias y tres localidades de Chilpancingo, esta mañana se movilizaron para exigir a los tres niveles de gobierno la reubicación inmediata de más de mil familias afectadas por la contingencia del mes de septiembre.

Gumaro Guerrero, presidente del frente de colonias afectadas por la tormenta 'Manuel', advirtió que si sus demandas no son atendidas con prontitud, en los próximos días podría iniciar una serie de acciones drásticas en Chilpancingo, como lo es bloquear indefinidamente la autopista del sol.

Refiere que a más de cinco meses no han visto nada claro en cuanto a los trabajos que se realizan para reubicarlos a otras zonas más seguras de Chilpancingo, por lo que aseguró que este jueves se vieron en la necesidad de salir a las calles.

Indicó que no ven un interés claro de las autoridades correspondientes, y denunciaron que hoy fueron "plantados" por varios delegados federales, funcionarios del gobierno del estado y del ayuntamiento capitalino.

El dirigente de las colonias afectadas comentó que las demandas centrales son, atención inmediata a las familias damnificadas, la reubicación de más de mil familias, la construcción de viviendas, la rehabilitación del encauzamiento del río Huacapa y la revisión de la situación de la presa Cerrito Rico.

Señaló que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) emitió un dictamen donde reconoce la existencia de fracturas dentro de la estructura de la presa Cerrito Rico, lo que, asegura, pone en riesgo la integridad física de miles de personas que habitan alrededor.

También refirió que los trabajos de rehabilitación del encauzamiento del río Huacapa son simples "parchaduras", pues en su mayoría sólo han levantado los tramos destruidos sin realizar un estudio técnico de factibilidad, para evitar futuros daños.

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