Los músicos Robin Thicke y Pharrell Williams enfrentan acusaciones de plagio por el exitoso tema Blurred Lines. La acción judicial fue emprendida por familiares del músico Marvin Gaye.

Williams como compositor y Thicke como intérprete enfrentan la batalla legal que en su primera ronda los dio como perdedores. De acuerdo a lo consignado por The Guardian, el juez que maneja la causa denegó la petición de los músicos de sentencia sumaria, aludiendo a que los antecedentes eran suficientes para emprender un juicio.

Los familiares de la familia Gaye habrían dado "muestras suficientes de que elementos de Blurred Lines son sustancialmente similares" al tema original Got to Give Up.

Parte de los procedimientos considerarían las declaraciones de Thicke en una entrevista a la revista GQ realizada en mayo de 2013, donde sostenía "Pharrell y yo estabamos en el estudio y le dije que una de mis canciones favoritas de todos los tiempos era Got to Give it Up de Marvin Gaye. Yo estaba como 'Maldita sea, debemos hacer algo como eso".

El hit musical fue recientemente atribuído por Thicke al autor de "Happy", Pharrel Williams. "He escrito y producido seis álbumes pero el tema más grande de mi carrera fue escrito y producido por otro: estaba celoso y quise atribuirme el mérito", afirmó en septiembre.

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