Las fuerzas turcas detuvieron a 14 personas -13 extranjeros y un turco- que buscaban cruzar la frontera hacia Siria para unirse al Estado Islámico (EI), como parte de los esfuerzos de Turquía para cortar el flujo de reclutas para el grupo yihadista.

Los 14 hombres fueron detenidos la noche del lunes pasado en Oguzeli, en la provincia de Gaziantep, en el sureste del país, informó este miércoles el Ejército turco en un comunicado publicado en su página web.

Después de haber sido interrogados, los 13 extranjeros fueron entregados a la policía para ser deportados a sus respectivos países, mientras que el turco fue liberado por orden de un fiscal estatal.

Turquía, que comparte 900 kilómetros de frontera con Siria, ha sido acusada en el pasado por su relajamiento en el control de sus fronteras, utilizadas como zona de tránsito por los combatientes extranjeros que buscan unirse al EI.

En el último año, las autoridades turcas han prohibido entrar al país a más de ocho mil extranjeros por razones de seguridad, sin embargo alrededor de tres mil personas están vinculadas de un modo u otro al EI en Turquía.

Los servicios de inteligencia policiales de Turquía demandan que se establezcan operativos de vigilancia sobre esas personas para determinar el grado de amenaza que suponen, según el diario turco Hürriyet.

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