Una delegación de senadores estadounidenses que visita Honduras priorizó el lunes abordar la problemática del aumento de la migración de hondureños, en especial de niños, que buscan la forma de llegar a ese país.

La delegación se entrevistó con el presidente Juan Orlando Hernández en la Casa Presidencial, con el propósito de conocer la estrategia del gobierno hondureño para el retorno de miles de hondureños, que este lunes empezaron a ser deportados de Estados Unidos.

La comitiva está integrada por Kay Granger, senadora republicana por Texas y presidenta del Comité de Apropiaciones del subcomité del Departamento de Seguridad Nacional; David Price, demócrata por Carolina del Norte; Mario Díaz Balart, republicano por Florida; Henry Cuéllar, demócrata; y John Carter, republicano por Texas.

El éxodo de los niños migrantes fue uno de los principales temas abordados en la Casa de Gobierno, indicó un comunicado oficial.

Los senadores llegaron a Tegucigalpa invitados por la primera dama, Ana de Hernández, quien viajó en fechas recientes al sur de Estados Unidos para visitar a los niños hondureños que permanecen en albergues migratorios.

La esposa del mandatario hondureño preside una comisión del gobierno para atender el retorno de niños, mujeres y hombres deportados de Estados Unidos y de México.

Se estima que más de 100 mil hondureños salen cada año del país, en su mayoría jóvenes y desempleados, muchos de los cuales desaparecen en la ruta.

La violencia imperante en el país, las pandillas que obligan a los jóvenes a integrarse a sus filas, así como la pobreza, son algunos de los motivos que orillan a los migrantes a salir hacia Estados Unidos.

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