Un soldado de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y seis talibanes murieron luego que los militares de la coalición internacional repelieron un intento de asalto a una de las bases de la alianza atlántica en la provincia de Nangarhar, en el este de Afganistán.

Un atacante suicida hizo estallar la carga explosiva que portaba en un automóvil en las afueras de la base en el distrito de Ghanikhil, uno de los más violentos de la provincia, y después cinco talibanes intentaron penetrar en las instalaciones militares pero fueron abatidos.

El portavoz de la provincia de Nangarhar, Ahmad Zia Abdulzai, confirmó la frustrada incursión de los rebeldes en la base de la OTAN, reportó el canal afgano de noticias Khaama Press.

La Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad (ISAF), bajo el mando de la OTAN, notificó que un miembro del servicio había muerto a consecuencia del atentado suicida en el este de Afganistán, pero no identificó la nacionalidad del soldado.

Zabihullah Mujahid, portavoz talibán, se atribuyó la responsabilidad por el ataque en un correo electrónico enviado a los medios internacionales.

Insurgentes afganos han intensificado sus ataques contra los miembros de la coalición internacional en una campaña para recuperar el territorio que las fuerzas extranjeras dejarán a finales de 2014.

Después del ataque, que se prolongó durante una hora, se encontraron cinco armas de fuego y una investigación se puso en marcha sobre el incidente, señaló el portavoz de la policía provincial, Hazrat Husain Mashriqiwal.

jlc