La Autoridad del Canal de Panamá (ACP) se comprometió hoy a finalizar las obras de ampliación de la vía, incluso más allá de junio de 2015, ante la amenaza de un consorcio internacional de suspender los trabajos a partir del 20 de enero.

"Nosotros nos comprometemos -olvídese de los de afuera-, con los panameños, de que vamos a terminar esta obra; que el tiempo va a ser mayor, sí, pero esto se va a terminar", dijo a corresponsales de prensa extranjera el administrador de la ACP, Jorge Quijano.

Afirmó que la mayor parte de los trabajos están completados, con un avance del 71%, con miras a finalizar en junio de 2015, por una demora de unos nueve meses, debido a que la fecha inicial de finalización era octubre de 2014.

El Grupo Unidos por el Canal de Panamá (GUPC) envió el pasado 30 de diciembre a la ACP una nota de pre-aviso de que suspenderá labores el 20 de enero próximo si la entidad desatiende sus reclamos de sobrecostos de la expansión por mil 600 millones de dólares.

El grupo, integrado por la española Sacyr Vallehermoso, la belga Jan De Nul, la italiana Impregilo y la panameña CUSA, ganó en 2009 el contrato de tres mil 221 millones de dólares para el diseño y construcción del tercer juego de esclusas, principal componente de la ampliación.

Quijano reveló que hasta ahora se ha pagado a tiempo y a los 16 días de emitidas las facturas, dos mil millones de dólares al GUPC y le permitió incluso retrasar el pago de 600 millones de dólares de adelanto entregados al inicio de las obras.

"Esperaría que recapaciten en su propuesta de suspender la obra, porque creo que les conviene a ellos igual que a la autoridad del Canal, completarla dentro de lo pactado y que el proceso de reclamaciones siga su curso" , explicó Quijano.

Según el administrador el problema es que el GUPC, al que acusó de violar los términos de contrato al ventilarlo en público, pretende negociar los reclamos fuera de lo pactado.

Indicó que el GUPC tiene tres instancias para reclamar, dos de ellas sin control canalero.

Aunque existe la amenaza de suspensión, Quijano señaló que las obras continuarán, con algún retraso, debido a que existe una fianza de cumplimiento con la empresa Zurich América, que permite la continuación.

Las alternativas ante ese escenario serían que la afianzadora opte por asumir el contrato "y ellos la terminan con la plata que tenemos de nuestro lado (entre mil 100 y mil 300 millones de dólares) y los 600 millones que no se han pagado" .

Otra de las alternativas sería que la afianzadora desembolse parte de la fianza a la ACP y ésta entonces asumiría el contrato para terminarlo.

Quijano indicó que siempre la ACP pagó sobrecostos cuando los considera justos e incluso ya ha desembolsado 160 millones de dólares (cinco por ciento del total de la expansión) por incremento de precios en acero, cemento, diesel y otros factores.

"Lo que no podemos hacer es asumir que la ampliación va a costar mil 600 millones de dólares más. Cada dólar van a tener que justificarlo, es la única manera en que van a recibir un dólar mas", advirtió Quijano.

La expansión, con costo de cinco mil millones de dólares, permitirá añadir un carril adicional a los dos existentes, para duplicar la capacidad de tránsito de la ruta.

El proyecto generó inversiones en puertos e instalaciones marítimas en diversas partes del mundo, además de que navieras ordenaron construir barcos del tamaño de las nuevas esclusas para aprovechar el atajo.

ahd