El gobierno del presidente Barack Obama ha apelado a sus aliados en el Congreso, en Wall Street y en todo el país a que sigan apoyando la ley de reforma de los servicios médicos, a pesar de los embarazosos problemas en el sitio web de inscripción.

Ahora que concluyó el cierre parcial de las operaciones del gobierno, la atención se centra en el lanzamiento de la página de internet de inscripción y una mayor presión sobre los demócratas para distanciarse de los problemas.

Obama grabó un mensaje el martes en que les dice a los partidarios de Organizing for America, un grupo sin fines de lucro alineado con el presidente, que necesita su ayuda y que hay personas trabajando duro para resolver los problemas.

El vicepresidente Joe Biden y otros altos funcionarios del gobierno también hablaron por teléfono el martes con líderes empresariales para discutir la implementación de la ley.

Por otra parte, el gobierno también enviará al Capitolio un funcionario del Departamento de Salud y Servicios Humanos el miércoles para que informe a los legisladores demócratas.

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