El jefe de la opositora Coalición Nacional Siria (CNFROS), Ahmad Yarba, pidió hoy a la comunidad internacional un "golpe de castigo" al régimen sirio, un posterior apoyo político y militar para derrocar a Bashar al-Assad y que éste sea juzgado por el Tribunal Penal Internacional de La Haya.

"El régimen de al-Assad dispone de total apoyo de Rusia, Hezbolá y de Irán. A nosotros nos falta de todo. Nuestros aliados no nos han dado nada de lo que pedimos. Necesitamos apoyo real", declaró Yarba en una entrevista publicada hoy por "Le Parisien", antes de su reunión en el Palacio del Elíseo con el presidente de Francia, François Hollande.

Según Yarba, al-Assad se ha convertido "en un microbio, una infección para la región" y no debe "escapar a las sanciones que merece".

"Ese señor y su familia deben comparecer en La Haya y ser juzgados delante del Tribunal Penal Internacional", sostuvo el líder de la oposición siria.

El primero objetivo para la oposición del CNFROS es derrocar al régimen para lograr una democracia, aunque si las acciones militares debilitan a Damasco, se podría alcanzar "una solución política", indicó.

"No queremos deshacernos de al-Assad para encontrarnos con Al Qaeda. Esos extremistas están manipulados por el régimen, que quiere asustar al mundo. Al principio de la rebelión, no había yihadistas. Cuando caiga el régimen, la mayoría de ellos desaparecerán", añadió.

Yabra recordó que Francia "ha desempeñado un papel esencial en la caída de (Muamnar) Gaddafi en Libia" y que "fue a afrontar a los extremistas en Mali".

"El régimen sirio es peor que el de Gaddafi. Y ha importado en el país los enemigos que Francia combatía en Mali. Si hay una intervención, el régimen no durará mucho. Lo esencial es tomar una decisión valiente" , señaló el jefe de la oposición, quien asegura que la coalición que encabeza incluye a diferentes comunidades sirias, como los árabes, kurdos, alauitas o drusos, entre otros.

ahd