Coleccionistas de arte en Alemania podrían apoyar, sin saberlo, a grupos terroristas del Estado Islámico.

Así lo denuncia el documental El patrimonio saqueado. La financiación del terrorismo por las casas de subastas de Alemania, indica el diario Süddeutscher Zeitung.

"Muchos coleccionistas de antigüedades apoyan involuntariamente grupos terroristas como el Estado Islámico", dijo Michel van Rijn -uno de los contrabandistas más exitosas de arte antiguo y la cultura de las últimas décadas- a dicho medio. Y agregó que Alemania es un punto muy importante en el traslado de piezas antiguas provenientes de países como Siria o Irak. 

Oferta/demanda

La venta de patrimonio cultural es un lucrativo negocio. El tráfico ilícito de arte genera alrededor de siete mil millones de dólares al año, según datos del FBI. Como ejemplo, una sola subasta en Munich, recauda en promedio más de dos millones de dólares, cita el diario alemán. En contraste, la persecusión por este delito va a la baja, añade. 

Los creadores de El patrimonio saqueado... rastrearon el camino que sigue el comercio ilegal de antigüedades. La investigación muestra cómo los ladrones de tumbas aprovechan la situación de crisis en Medio Oriente para hacerse de las piezas y venderlas en el mercado negro. Muchas de ellas pasan luego a formar las "colecciones privadas" que posteriormente se ofertan en las casas de subastas, describe el Süddeutscher Zeitung.

Según Die Bild, de las fuentes que subvencionan al terrorismo islámico (venta de petróle, robo de bancos) la venta de arte ilegal en casas de subasta es la principal.

sc