Voces de personajes históricos de México, narraciones y crónicas de acontecimientos relevantes, testimonios de lenguas nativas, escenificaciones dramáticas, oficios y música de todo tipo, es parte del material que la Fonoteca Nacional rescata y preserva para ponerlo a disposición del público.

La institución, abierta en diciembre de 2008, es la única en su tipo en América Latina y alberga más de 439 mil soportes sonoros, 360 mil documentos catalogados y más de 70 mil horas digitalizadas que se pueden consultar en la Casa Alvarado de Coyoacán.

En un comunicado, el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) destacó que la Fonoteca tiene cinco actividades prioritarias: rescatar y preservar el patrimonio sonoro del país, dar a conocer el acervo que resguarda, realizar actividades relacionadas con el sonido, fomentar la cultura de la escucha y estimular la creación y experimentación artística sonora.

Actualmente, la institución cuenta con 426 mil soportes sonoros que se encuentran conservados en bóvedas, desde cilindros de cera, cintas de carrete abierto, discos analógicos, discos compactos, casettes, dats, mini disc, mismos que están inventariados.

En ese sentido, la directora de la Fonoteca Nacional, Lidia Camacho, comentó que han catalogado 360 mil documentos y digitalizado alrededor de 65 mil horas en cinco categorías que son medios digitales, música, paisaje sonoro, radio y voz.

Camacho, una de las fundadoras de la institución, acotó que cuando un país cuenta con una Fonoteca tiene conciencia de la importancia del patrimonio sonoro, y recordó que tras haber visitado varias fonotecas en el mundo, se dio cuenta que no todas tienen un factor fundamental que es el acceso al patrimonio.

Por su parte, el periodista Jaime Almeida compartió que la Fonoteca tiene una importancia comparable con la Biblioteca Nacional, la Filmoteca de la UNAM o la Fototeca, pues preserva lo que la sociedad ha sido en términos sonoros.

"Así como hay fotografías, películas, periódicos, la vida también tiene un sonido que requiere preservarse; La captura de documentos ha sido enorme, es un patrimonio sorprendente, no solamente en el aspecto musical", dijo Almeida, quien se refirió a la Fonoteca como una institución vital para la memoria social de México.

Como parte de sus funciones, el organismo tiene la encomienda de exponer los archivos guardados, una vía de realizarlo es a través de la Audioteca Octavio Paz, lugar donde mediante 15 equipos de cómputo, se puede consultar y tener acceso al repertorio que la entidad ha catalogado y digitalizado.

Por medio de este sistema se puede tener acceso a las más de 150 colecciones provenientes de instituciones públicas y coleccionistas privados, donde se puede escuchar música de concierto, música tradicional y popular mexicana, grabaciones históricas, programas radiofónicos, comerciales y periodismo sonoro, entre otros.

De igual manera, Lidia Camacho comentó que entre las acciones destaca el acervo de la XEW, el cual contiene alrededor de 145 mil soportes sonoros de diversa índole, donde destacan las radionovelas, programas cómicos, entrevistas, programas musicales y para niños, por mencionar algunos.

Otro de los acervos de enorme valor, acotó, es el de Radio Universidad, institución que cedió programas como radioteatros, radionovelas adaptadas de novelas clásicas o mexicanas; y subrayó que por sus micrófonos han pasado intelectuales, historiadores y dramaturgos, entre otros.

Al ver que la Fonoteca Nacional cuenta con todas las condiciones para preservar acervos, la directora mencionó que los coleccionistas privados, que han formado su propia colección, han ido a depositarlos como el archivo de 15 mil documentos, "El Bachiller", de Álvaro Gálvez y Fuentes.

Otras colecciones que alberga la Casa de los Sonidos son las del Instituto Nacional de Bellas Artes, el Instituto Mexicano de la Radio, la Dirección General del Virreinato, Radio 620, Instituto Nacional de Antropología, Dirección de Radio y Televisión, la Embajada de Francia, el Museo de Arte Moreno, por referir algunas.

Es por eso que, basado en sus colecciones, la institución ha armado una serie de catálogos, como el de música de concierto mexicana, jazz, del bolero en México, así como música popular y tradicional.

La consulta del material es otro de los puntos a explotar por parte de la Fonoteca, por lo que se han explotado sesiones de escucha donde se dan cita expertos que dan al público los contextos de algún documento como programas musicales, entrevistas o radionovelas, expuso la directora.

Conciertos, exposiciones e instalaciones sonoras, cursos, talleres y seminarios, así como caminatas sonoras, también forman parte de las actividades artísticas, académicas y culturales que ofrece la Fonoteca Nacional.

Al igual que recorridos en silencio por diferentes sitios con el objetivo de escuchar elementos bajo la guía de un especialista que enseña a reconocer las sonoridades circundantes, y rodadas sonoras, además de traslados realizados en bicicleta.

Camacho, también miembro del Comité Mexicano Memoria del Mundo de la UNESCO, detalló que la Fonoteca ha realizado un fuerte trabajo en su página web como la creación de cinco estaciones de radio por internet que son Arte sonoro iberoamericano, Música de concierto, Jazz en México, Música Mexicana de concierto y la Estación violenta.

"Ya son cinco estaciones de radio por internet que se pueden consultar en la web y aplicaciones móviles, es así que el público, si no puede venir, puede encontrar estas propuestas y escuchar la transmisión vía streaming de muchos de nuestros eventos", contó.

También se ha realizado un importante trabajo en redes sociales como Facebook y Twitter, a través de las cuales se presentan sonidos de diversa índole, datos, efemérides y notas informativas referentes a la Fonoteca Nacional.

"Tenemos una red social bastante activa y eso va generando ese acercamiento a la institución que está trabajando para que el público lo note y encuentre en este espacio un lugar en donde puede venir a consultar todo tipo de material", sostuvo.

Expuso que la Fonoteca es en realidad una recién nacida, en comparación con la más antigua en el mundo que tiene 110 años, pero ha generado toda una serie de reflexiones en torno a lo que es el cuidado e importancia del patrimonio sonoro en una sociedad.

"Somos la única Fonoteca en América Latina, misma que ha creado un precedente, siendo una referencia prácticamente obligada en todos los países latinoamericanos" , aseveró.

La directora de la institución admitió que la tecnología digital representa un reto y una plataforma para la organización que preside, por lo que también destacó los avances en la materia.

"Hoy día prácticamente todo proviene de la tecnología digital y eso también conlleva muchos retos, uno de ellos es cómo ir incrementando el acervo de manera interesante, que contemos con archivos sonoros que den cuenta de la vida cultural, histórica y política del país", notificó.

"Reflexionar sobre los formatos digitales actuales y en el cómo generar una política de integración de archivos que ya vienen en soportes digitales, porque pareciera que al estar en un soporte digital es más sencillo, pero hay que también tener mucho cuidado con los diferentes parámetros", agregó.

Mencionó que uno de los retos más importantes de su administración es que el material que ya tiene digitalizado la institución llegue a todo el país y que todo el público tenga acceso.

"Este año buscamos por lo menos tener 100 estaciones en diferentes partes del país. Tenemos tres prototipos digamos de fonoteca, por ejemplo la de Ciudad Juárez que es un espacio destinado a ser la Fonoteca del Paso del Norte", dijo.

Se refirió a la Red de Fonotecas virtuales, plataforma tecnológica creada por la institución, misma que permite la difusión del acervo de la institución, a través de módulos ubicados en diversas instituciones de cultura del país.

Indicó que cada fonoteca virtual cuenta con una o más estaciones de escucha, gracias a las cuales los usuarios pueden consultar y escuchar completos audios que la Fonoteca Nacional ya ha inventariado, catalogado, y digitalizado.

Hasta el momento se encuentran en funcionamiento 36 fonotecas virtuales distribuidas en 17 estados de la República Mexicana como Baja California, Chiapas, Chihuahua, Distrito Federal, Guanajuato, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Morelos y Yucatán, entre otros.

Cualquier institución cultural o educativa puede solicitar la instalación de una fonoteca virtual, que para contar con una sólo se necesita de una computadora, audífonos y conexión a internet, de no tener esta conexión la institución puede instalar una amplia sección de su acervo gracias a un desarrollo informático propio.

"Para nosotros es muy importante llevar este proyecto a toda la frontera norte, ya entablamos comunicación con el Colegio de la Frontera Norte. La idea está en que haya por lo menos una terminal en todas las bibliotecas de la red que cuenten con la tecnología", afirmó Camacho.

Otra acción de difusión del acervo es que en tabletas electrónicas, cerca de 720 mil que va a entregar la Secretaría de Educación Pública, estará instalada la aplicación de la Fonoteca itinerante, la cual no requiere de conexión.

"Estoy segura que este proyecto será de enorme utilidad en el sentido de sensibilizar a los niños en el tema del sonido; hoy lo visual impera sobre lo sonoro y para los papás y sus hijos será algo muy novedoso", manifestó la directora.

"El sonido quizá ha sido lo menos importante y olvidado en nuestra cultura, pero ya una vez conscientes del valor de este documento tenemos una tarea muy importante a desarrollar, el concientizar a un mayor número de personas de la importancia de este patrimonio", finalizó.

Junto con la Audioteca Octavio Paz, los visitantes o usuarios también pueden consultar la Biblioteca Salvador Novo, que alberga 700 títulos, alrededor de dos mil 500 ejemplares y cerca de 200 dvd's, y donde el usuario puede investigar el origen de un género musical y sus principales exponentes.