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La línea de Metrobús que correrá por el Paseo de la Reforma deberá tener como objetivo que las personas se bajen de sus automóviles, para utilizar el transporte público.

El presidente del Colegio de Urbanistas, David Baltazar y la directora ejecutiva del CTS Embarq México, Adriana Lobo, calificaron como acertado el anuncio del gobierno capitalino, siempre y cuando se combine con adecuada planeación y orden en el servicio.

“Reforma es una vía que sin ninguna duda necesita un transporte de muy buena calidad, es la vía más emblemática de la ciudad y necesita de un transporte ordenado con mucho mejor servicio y creo que un proyecto de Metrobús lo puede dar”, dijo Adriana Lobo.

Precisó que de acuerdo con datos del CTS Embarq, diariamente sobre el Paseo de la Reforma se trasladan 175 mil pasajeros, con mayores concentraciones en el tramo que va de La Villa al Centro Histórico y desde éste punto hasta el Periférico.

Por ello, la directora de esta organización no gubernamental recomendó que la nueva línea de Metrobús opere a semejanza de la Línea 1, que corre por Insurgentes, con rutas largas y cortas en un mismo corredor.

Guillermo Calderón, director general de Metrobús declaró a EL UNIVERSAL que la nueva línea irá de Indios Verdes hasta Periférico con una longitud de 17 kilómetros, en la que correrán unos 85 autobuses de doble piso y piso bajo. Se tratará, precisó, “de una línea con infraestructura similar a la de Línea 4”. 

Beneficios ambientales. El presidente del Colegio de Urbanistas afirmó que esta línea traerá consigo una transformación no sólo de imagen sino también, de conectividad con el resto de los modelos de transporte de la zona, como Ecobici.

“Sería un sistema paralelo y alternativo al que existe actualmente y a los que se están proponiendo como es el tren rápido hacia Toluca”, comentó.

David Baltazar también celebró que en la puesta en marcha de la línea se tomen en cuenta autobuses de doble piso y articulados, que brinden mayor capacidad.

Sobre ello, la titular del CTS Embarq México destacó que también mejorarán las condiciones ambientales, pues se producirán menos emisiones contaminantes y ruido, beneficios que incrementarán si se consideran autobuses híbridos.

“Cuando vas viajando es uno de los momentos en que más respiras contaminantes, lo que hemos visto es que después del Metrobús (en las líneas 1 y 5) se redujeron de 30% a 50% los contaminantes que respiraban. Entonces el impacto sobre la salud de las personas que van sobre el mismo corredor es importante y es algo que de pronto los habitantes no ven”, explicó. 

Servicio a Santa Fe. Aunque el proyecto hasta el momento sólo considera servicio hasta el Periférico, ambos especialistas consideraron que llevar los autobuses hasta Santa Fe también debería ser considerado, pues el servicio a esta área de la ciudad es deficiente.

Reconocieron que de ser el caso, quienes mostrarán mayor oposición serán los vecinos de la zona de Lomas debido a las afectaciones que podría haber en los camellones, así como en su vida cotidiana.

“La gente de las Lomas no tendría que tener una preocupación, lo que la gente quiere es llegar de una manera más rápida y segura (hacia Santa Fe), sería una zona de paso, pero también hay quienes trabajan en la zona que requieren de un mejor transporte. Se debe pensar en una ciudad mucho más equitativa”, dijo Adriana Luna.

Mientras que el titular del Colegio de Urbanistas destacó que para evitar la oposición vecinal el gobierno capitalino debería considerar “una mitigación con pocas estaciones”, pues se trata más bien de una zona de paso. 

jram