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Son más de 400 sustancias las que contiene la mariguana, entre ellas el delta -9- tetrahidrocannabinol (THC), es el de mayor impacto sicoactivo, es decir, el que causa efectos directamente al sistema nervioso y el principal responsable de procovar adicción en quien consume yerba.

El THC también ocasiona déficit cognitivo, falta de memoria y trastornos en los usuarios de cannabis.

Silvia Cruz Martín del Campo, investigadora del Departamento de Farmacobiología del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (Cinvestav), explicó que la presencia de THC en la mariguana se ha incrementado, principalmente por nuevos métodos de cultivo y formas de preparación de las sustancias a base de mariguana.

“Ahora ha mejorado el método de cultivo, la técnica, se tiene algunas variedades en las que se ha logrado aumentar la cantidad de sustancia activa y se venden formulaciones que son más concentradas”, puntualizó.

Aunado a ello, el consumo de mariguana se ha modificado: antes sólo se fumaba; hoy se come, se unta en cigarrillos (a través de aceites) y se ingiere a través de pipas con agua. Ello provoca que los tiempos de exposición a la droga sean mayores y que quien la consume esté más expuesto al THC, agregó.

Por ejemplo, las pipas con agua con las que se fuma mariguana disminuyen la irritación que provoca el humo, debido a que el agua humecta. Esto significa que el tiempo de exposición a la mariguana aumenta, porque las molestias disminuyen.

Además, los productores hoy en día extreman los cuidados a los que someten la yerba e incluso la cultivan de forma hidropónica (a través de agua). Actualmente, también es posible saber el momento en que las plantas femeninas tienen mayor producción. Este tipo tiene más alto contenido de la sustancia adictiva, explicó la especialista.

“Si a esto le agregas las formas de consumo que se están generalizando, la exposición es más grande. Comer mariguana en pastelillos tipo brownies provoca que algunos compuestos se activen aún después del proceso de cocción, y su efecto sea más lento, pues al no sentir nada de forma instantánea, los consumidores ingieren más y no controlan la cantidad y sus efectos”, indicó la especialista.

Otra modalidad para consumir mariguana que incrementa la exposición a la sustancia adictiva es mojar cigarros con aceite de cannabis para luego fumarlos. Ello aumenta la exposición al THC de 20% a 70%, lo que se traduce en aumneto de efectos como la ansiedad.

“Natural no quiere decir que no haga daño. No puedo decir que por ser natural tiene cualidades innatas, porque naturales son muchas cosas que nos intoxican y hacen daño, hay venenos que son naturales”, indicó Silvia Cruz.

Consecuencia de consumo temprano

La especialista explicó que el consumo de mariguana se da de manera común en la adolescencia y mientras más joven inicia la ingestión mayores serán los efectos a largo plazo.

“La maduración del sistema nervioso central es lenta, en particular en las partes relacionadas con la toma de decisiones”, dijo y recordó que el cerebro humano madura totalmente hasta los 21 años.

Dado que los adolescentes tienen menos eventos adversos inmediatos al consumir mariguana (pues casi no presentan ansiedad), frecuentemente repiten la experiencia. Sin embargo, aunque no presenten ansiedad, los efectos a largo plazo de la ingestión del THC serán mayores. Uno de ellos será la disminución de ciertas funciones cognitivas, en particular la capacidad de consolidar algo que estás aprendiendo.

“No se afecta la memoria previa, pero si tienes a un joven bajo el efecto de cannabis y le enseñas algo, esa información difícilmente la puede aprender o repetir, está demostrado”, enfatizó.

¿Dónde afecta el THC?

El THC influye en regiones del cerebro como el hipocampo, una zona importante para la formación de la memoria y aprendizaje, dijo la investigadora.

En los adultos que comienzan a consumir, el efecto puede durar varias semanas, pero si suspenden la ingesta recuperarán la capacidad de memoria. En cambio, si el consumo inicia durante la adolescencia, la persona no recuperará la memoria totalmente: “El déficit a más largo plazo es mucho más probable que ocurra en personas que iniciaron el consumo en la adolescencia. Es como si (la droga) interfiriera en el proceso de maduración y una de las partes que quedan débiles es la de la memoria”, advirtió.

Alejandro Sánchez Guerrero, director de Prevención de los Centros de Integración Juvenil (CIJ), explicó que la falta de memoria y capacidad de aprendizaje son de las principales consecuencias que derivan del consumo de mariguana; añadió que cada experiencia es única y los efectos son percibidos de maneras diferentes.

Sin embargo, reconoció que el lóbulo frontal del cerebro es uno de los más afectados al consumir mariguana y ello repercute en la toma de decisiones. Además, provoca episodios depresivos, apatía y depresión y afecta el sistema inmunológico.

Debate científico no ideológico

Para Silvia Cruz el debate en torno a la legalización de la mariguana debe ser científico y no ideológico.

“No se trata de considerar a las sustancias como negativas o positivas, sino de dar evidencia científica de en qué casos se corren riesgos para la salud”, dijo.

Para Alejandro Sánchez, “lo que no podemos hacer es evitar la discusión pública y sin ningún tipo de ideología política. Que la población conozca con evidencia científica cuáles son las consecuencias del uso de la mariguana”.

Silvia Cruz reconoció que la mariguana tienen efectos antiinflamatorios, elimina las náusea que produce la quimioterapia y disminuye la presión ocular ocasionada por el glaucoma, entre otros.

Reconoció que existen efectos positivos del enervante y bajo condiciones científicas se podría sacar ventaja de ello. Advirtió que en el país no existen las facilidades necesarias para desarrollar investigación al respecto.

Pidió a los legisladores que en el debate sobre la legalización de la mariguana se incluya a la investigación científica y no sólo se hable del consumo.

El ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Juan Ramón de la Fuente, se ha pronunciado a favor de la despenalización de la mariguana en el Distrito Federal y de abrir el debate al respecto.

Quien fuera secretario de Salud durante el sexenio de Ernesto Zedillo ha reconocido que la mariguana sí produce efectos nocivos para la salud y sus consecuencias son variables dependiendo del momento en que inicie el consumo, las dosis y la frecuencia de la ingesta. También ha asegurado que afecta los tiempos de reacción al conducir y que el riesgo de producir un accidente se eleva hasta dos o tres veces más bajo la influencia de cannabis.