En el PRI el caso Cuauhtémoc Gutiérrez aún no está  cerrado. Nos comentan que pronto el tema podría volver a subir de temperatura y pues el consejero político que solicitó su expulsión, Armando Barajas Ruiz, encontró ilegalidades en el proceso.

A decir del consejero, el PRI violó su propia normatividad para cumplir con el mandato del Tribunal  Electoral que ordenó al partido emitir un fallo el pasado viernes en el que dijera si Gutiérrez quedaba o no expulsado del PRI, luego de que fue acusado de operar una red de prostitución al interior del partido. El PRI suspendió el pasado viernes los derechos partidistas de Gutiérrez de la Torre, pero no lo expulsó.

Nos dicen que Barajas alista una nueva impugnación ante la autoridad electoral en donde acusará a su partido de no ser respetuoso de su legalidad interna y sobretodo porque cuestiona cómo es posible que el PRI sí haya encontrado a Sandra Baca, Priscila Martínez y Adriana Rodríguez, a quienes la Procuaduría General de Justicia del DF y el Instituto Electoral del DF nada más no encuentran.

 Las tres mujeres, nos aseguran, declararon ante la Comisión Nacional de Justicia Partidaria del PRI el pasado 18 de marzo.

¿Alguien protege al poderoso líder político del DF, herederos del imperio de la basura?