Vive Chilpancingo jornada violenta; deja 25 heridos
Durante los preparativos del concierto La luz en la oscuridad por Ayotzinapa se enfrentaron policías federales e integrantes de la CETEG. (Foto: Cristopher Rogel Blanquet. EL UNIVERSAL )
Chilpancingo, Gro.— El saldo de la jornada violenta que se vivió ayer en Chilpancingo fue de ocho policías federales heridos —tres de ellos reportados como delicados de salud por los golpes que recibieron— así como 17 civiles lesionados y tres vehículos oficiales incendiados, cuando los uniformados querían contener a un grupo de encapuchados y rescatar a tres de sus elementos que fueron sustraídos del hotel en el que se alojaban.
Alrededor de las 04:00 horas, estudiantes normalistas, familiares de los 43 desaparecidos e integrantes de la de la Coordinadora Estatal de los Trabajadores de Guerrero (CETEG), colocaban vallas sobre la avenida Insurgentes como parte de los preparativos del concierto La Luz en la Oscuridad, convocada por bandas de distintos géneros en apoyo a los familiares de Ayotzinapa.
La Policía Federal había solicitado a la CETEG y a sus acompañantes que dejaran salir a los elementos que aún estaban en el hotel que había quedado entre el territorio cercado para el concierto; sin embargo esto no sucedió.
Cuando se colocaban las vallas para el evento, según la versión de los normalistas, fueron interceptados por cinco policías vestidos de civil que viajaban en un taxi, tenían supuestamente aliento alcohólico y los agredieron verbalmente.
El grupo radical comentó que al llegar al hotel Real del Sol, los federales salieron acompañados por más elementos y amagaron con sus armas a los normalistas.
Sin embargo, el grupo de encapuchados detectó que en el Hotel Diplomático, ubicado una calle antes del Real del Sol, había policías federales y fueron por ellos.
Ingresaron al hotel para obligar a salir a los policías a punta de palos, patadas, puñetazos y todo lo que encontraron para golpear. Los tres elementos asegurados fueron subidos a una de las camionetas color blanco que utiliza la CETEG, y se los llevaron.
Enfrentamientos. Al circular el grupo disidente sobre Avenida Insurgentes, se encontraron con más elementos de la Policía Federal quienes llegaron para auxiliar a sus tres compañeros privados de la libertad.
Con gases lacrimógenos y balas de goma, la Policía Federal contuvo a los maestros de la CETEG, a normalistas y familiares de Ayotzinapa; pero no logró rescatar a sus compañeros pues la camioneta que los llevaba a bordo logró salir de la trifulca, que dejó cuatro detenidos.
Cuando ya todo se había calmado, hubo otro enfrentamiento sobre la Avenida Insurgentes. Una persona vestida de civil que no ha sido identificada como Policía Federal ni como parte del movimiento de la CETEG o de Ayotzinapa, subió a una camioneta y embistió a varias personas, entre ellas a tres policías federales.
Entre los civiles lesionados en los disturbios está Ernesto Cruz Flores, estudiante de la UNAM, quien fue alcanzado por un proyectil en la mandíbula, ocasionándole una fractura.
También resultaron lesionados Lambertino Cruz Antonio y Mario César González Cabrera, padres de dos de los normalistas desaparecidos en septiembre pasado.
Otros de los lesionados son los maestros Manuel Salvador Rosas Zúñiga y Osmín Valdés Hipólito, ingresados al hospital del ISSSTE en Chilpancingo; y los periodistas Carlos Alberto Ogaz Torres, reportero de Regeneración Radio; y Alejandrino González de Associated Press (AP).
Alrededor de las 7:30 horas, José Luis Solís López, el comandante Espartaco de la Policía Federal, comenzó las negociaciones con el líder de la CETEG, Ramos Reyes Guerrero, para recuperar a sus compañeros.
El mando de la Policía Federal pidió el regreso de sus tres elementos que fueron sustraídos del hotel; en tanto que Reyes Guerrero solicitó la liberación de cuatro personas.
Minutos después los cuatro manifestantes fueron liberadas, una de ellas con golpes visibles en el rostro, quien exigió se le devolviera su mochila y su cartera.
El líder de la CETEG indicó al comandante Espartaco que indagarían dónde se encontraban los tres Policías Federales; minutos después fueron liberados cerca de la caseta de cobro del nuevo libramiento a Tixtla.
Vandalismo. Horas después se registraron otros hechos vandálicos. El primero sucedió afuera del Instituto Universitario de Ciencias Policiales de la policía estatal (Infocap).
Ubicado sobre la autopista del Sol, ahí llegaron personas encapuchadas y prendieron fuego a dos camionetas oficiales; asimismo arrojaron piedras al inmueble. En otra acción, incendiaron otra camioneta oficial a la altura de la glorieta del Caballito, sobre la Avenida Insurgentes, cerca de donde ocurrieron los hechos de la mañana.