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El ex secretario de Gobierno de Michoacán, Jesús Reyna García, sostuvo encuentros con líderes del cártel de Los Caballeros Templarios, entre ellos su máximo líder Servando Gómez Martínez, alias La Tuta, por lo que fue arraigado por la PGR. Existen otros casos de políticos de otros partidos con posibles nexos con el narcotráfico.

El procurador Jesús Murillo Karam expuso así algunos elementos de esta investigación que devela posibles vínculos de la clase política de Michoacán con el crimen.

Destacó que “es el inicio del desmantelamiento de una red de delincuencia, no podría llamarla política, porque dejaría de ser política yo no creo que los partidos sean responsables de lo que hagan alguno de sus miembros, puede que haya algunos integrantes que sean delincuentes sin que los propios partidos los detecten”.

En entrevista, indicó que “a partir de las investigaciones encontramos muchas evidencias —no es el único caso—; de las evidencias que se encontraron podemos tener la certeza de reuniones de Reyna con líderes, diría yo con el líder más importante de las organizaciones que operan ahí (La Tuta)”.

El procurador Murillo Karam indicó que “tenemos ya elementos para pensar que hubo contactos con este tipo de organizaciones que nos obligan a profundizar y para ello y dado el tamaño de los personajes, es que solicitamos el arraigo, con el cuidado que lo hemos hecho siempre, buscando que el arraigo sea la protección de un bien superior, que en este caso es el problema que nos genera en ese estado la delincuencia organizada y quien pueda estar incluido en la delincuencia organizada”.

Aunque el procurador se reservó detalles sobre la época en que se dieron las reuniones entre Reyna y los cabecillas, existe un informe de inteligencia —que ya es público—, que se entregó al secretario de Seguridad Pública de Michoacán, Elías Álvarez Hernández, en el que se le informó que Reyna, en ese momento coordinador de campaña del PRI, sostuvo encuentros con operadores de Los Templarios en marzo de 2011 “para establecer una estrategia política electoral y de acuerdos mutuos”.

Los encuentros que se realizaron en Uruapan, presuntamente se repitieron en septiembre de 2011, y Reyna habría estado acompañado por otros priístas, para concertar el apoyo de los templarios a sus proyectos de gobierno.

De hecho, Murillo Karam al señalar los aspectos de la investigación que llevaron a la detención del ex secretario de Gobierno de Michoacán el 4 de abril pasado, y a su posterior arraigo, reveló además que “no es el único, hay varios casos, y la instrucción que yo tengo hasta este momento del gobierno de la República es actuar, independientemente de quiénes son, qué piensan, de qué partido o que filiación tienen, nosotros lo que perseguimos son delitos y si tenemos evidencia de ilícitos actuamos”.

Se le preguntó si la indagatoria podría llegar incluso al gobernador Fausto Vallejo, a lo que respondió: “no le puedo decir una persona, porque no sería correcto ni justo, va a llegar hasta donde tenga que llegar (…) La instrucción precisa es muy claro no importan creencias ni filiaciones lo que importa es detener a quien viola la ley”.

Añadió que “hemos tenido políticos con pruebas contundentes y no nos hemos fijado de qué filiación son”, sino que las pruebas verdaderamente los inmiscuyan.