El 'Teleárbitro', un hombre con suerte

PERSONAJE. Su meteórica trayectoria comenzó un año antes de titularse; 16 años después tiene la tarea de regular la competencia entre titanes de las telecomunicaciones. (Foto: ILUSTRACIÓN LETICIA BARRADA )
El titular del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) empezó su carrera en un cargo directivo en el gobierno. Un año antes de titularse como licenciado en Derecho por la Escuela Libre de Derecho —con la tesis El derecho penal mexicano ante el crimen informático—, Gabriel Oswaldo Contreras Saldívar consiguió un empleo como subdirector de Proyectos Normativos en la Procuraduría General de la República (PGR).
Desde 1998 y hasta la fecha, su meteórica carrera ha ido en ascenso de manera ininterrumpida: ha ocupado cargos públicos de mandos medios y superiores como subdirector, asesor, director general. Tuvo la suerte de no desempeñarse como jefe de departamento ni como enlace y, mucho menos como operativo. Y ahora, 16 años después, Contreras es el árbitro en el campo de batalla que libran los gigantes en telecomunicaciones.
A sus 41 años, es considerado por personas que lo conocen y fueron consultadas como un hombre de la cultura del esfuerzo, trabajador, discreto, conservador y, además, con suerte. En su trayecto como servidor público se ha relacionado con abogados panistas cercanos al ex presidente Felipe Calderón y a funcionarios priístas del Estado de México.
Para sus amigos, Gabriel es un hombre que disfruta de la buena lectura, del cine y el teatro. También lleva una vida sencilla y de familia. Su principal pasión son las corbatas de diseño.
Siempre ha estado muy cerca de su familia. Tiene un hermano gemelo, Alán Gabriel Contreras Saldívar, reconocido trasplantólogo con estudios en Estados Unidos y actualmente adscrito al Departamento de Trasplantes del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán.
Gabriel y Alán tienen dos hermanas. Desde jóvenes quedaron huérfanos de padre; gracias a su madre salieron adelante. La educación que recibieron fue la de la cultura del esfuerzo, alimentada por valores como la honestidad y la responsabilidad, dicen quienes lo conocen.
Como parte de su formación académica, cursó el máster de Derecho, Economía y Políticas Públicas en el Instituto Universitario de Investigación Ortega y Gasset, de Madrid, donde también han estudiado priístas como el gobernador de Veracruz, Javier Duarte.
Lo que no queda claro es cuándo realizó este posgrado, pues su currículo señala que ha tenido actividades ininterrumpidas como funcionario público. No define el año en que vivió en España para llevar a cabo tales estudios. El área de comunicación social del IFT no proporcionó información al respecto.
Y por consultar a su esposa...
En su época de universitario conoció a Arcelia Olea, quien desde hace más de una década se convirtió en su esposa y con quien ha procreado dos hijas. Ella también es abogada por la Escuela Libre de Derecho y tiene más de 15 años trabajando en la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Para Contreras Saldívar, su familia ocupa un lugar preferente en su vida, además de su trabajo. Consulta las decisiones importantes con su esposa. Quienes lo conocen comentan que a finales del sexenio de Calderón, el entonces secretario de Gobernación, Alejandro Poiré, le llamó al ex consejero jurídico de la Presidencia, Miguel Alessio Robles, para que le preguntara a Contreras Saldívar si le interesaba ocupar el cargo de subsecretario de Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos de la dependencia, a lo que el ahora presidente del IFT respondió que no podía tomar una decisión en ese momento porque tenía que consultarlo con su esposa. Esa respuesta generó que no fuera elegido para la subsecretaría.
Pero no tuvo que esperar mucho tiempo para que se le presentara otra oportunidad. En septiembre de 2013, 94 senadores, de 128, lo ratificaron como presidente del IFT hasta 2020, dos años después de que termine el sexenio del presidente Enrique Peña Nieto.
Ahora ocupa el cargo público que, probablemente, esté sometido a mayores presiones. Uno de sus principales objetivos es lograr la justa competencia entre las empresas que dominan el espectro de las telecomunicaciónes: Televisa, de Emilio Azcárraga, y América Móvil, de Carlos Slim.
Hace poco, la organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que agrupa a 34 países, señaló que México es el país donde está más concentrado el mercado de las telecomunicaciones móviles y fijas. Este sector está considerado como uno de los motores de la economía en el país, cuyo mercado está valuado en 35 mil millones de dólares al año, de acuerdo con Financial Times.
Abogados políticos en su camino
En su vida como funcionario público, Gabriel se ha rodeado de abogados que lo han acompañado en su exitoso camino. Panistas cercanos al grupo de Calderón, como César Nava y Miguel Alessio Robles, se hicieron amigos de Contreras cuando trabajaron en la Consejería Jurídica de la Presidencia de la República en los sexenios de Fox y Calderón.
“Es el mejor abogado de la administración pública que he conocido y era mi brazo derecho. Es un gran servidor. Tiene una gran capacidad de aprehensión y explicativa. Él se encargaba de elaborar todos los proyectos del gobierno federal en materia de telecomunicaciones”, dijo en una ocasión Alessio Robles, ex consejero jurídico de Calderón.
“Gabriel era el consultor de Calderón en todo lo referente a los temas de telecomunicaciones. Los documentos que elaboraba Gabriel pasaban por mí y luego se le entregaban al ex presidente. Estoy seguro que hará un gran papel en el IFT con la experiencia que adquirió en la Consejería Jurídica”, añadió.
Alessio Robles es abogado y profesor por la Escuela Libre de Derecho y fue adherente del PAN de 1997 a 2012. No ha renovado su afiliación al partido.
También en la Consejería Jurídica, Contreras Saldívar conoció a Alejandro Jaime Gómez Sánchez, abogado y funcionario del Estado de México, con quien estableció amistad. De 2010 a 2012, el ex procurador de la entidad, Alfredo Castillo, lo nombró subprocurador en el gobierno de Enrique Peña Nieto.
En el sexenio foxista, Gómez Sánchez fue consejero adjunto de Legislación y Estudios Normativos en la Consejería. En diciembre de 2012 regresa a la Consejería y es nombrado consejero adjunto de Consulta y Estudios Constitucionales, por lo que se reencuentra con su amigo Contreras Saldívar.
Esa amistad le permitió a Contreras Saldívar permanecer en la Consejería Jurídica los primeros 10 meses del gobierno de Peña Nieto, luego del trabajo que desempeñó para Calderón en telecomunicaciones.
También, coincide nuevamente en el mismo organismo con Humberto Castillejos Cervantes, actual consejero jurídico de Peña Nieto. En el sexenio foxista, en 2000, ambos trabajaron en la PGR. Contreras Saldívar como director de Asistencia Jurídica Internacional y Castillejos como asesor del ex procurador Rafael Macedo.
Catorce años después se reencuentran, pero ahora Castillejos es el jefe de Contreras y lo nombra consejero adjunto de Legislación y Estudios Normativos de Peña Nieto, área considerada estratégica en las negociaciones que llevó a cabo la Presidencia con diputados y senadores durante las reformas constitucionales más relevantes en el primer año del sexenio.
El titular del IFT también trabajó al lado del panista César Nava. Su relación de amistad inició en la Consejería Jurídica de la Presidencia en el sexenio foxista. Fueron consejeros adjuntos de Juan de Dios Castro, quien fue el abogado de la Presidencia de Vicente Fox.
Posteriormente, en 2006, Calderón nombra a Nava su secretario particular. Un año después, el panista invita a Contreras a trabajar como su secretario técnico. En este cargo tiene contacto con Miguel Alessio Robles, quien posteriormente lo invita a trabajar con él y en 2009 regresa a trabajar en la Consejería Jurídica, ahora como consejero adjunto de Consulta y Estudios Constitucionales, donde permaneció hasta diciembre de 2012. Posteriormente, en el gobierno de Peña Nieto lo nombran consejero adjunto de Legislación y Estudios Normativos, cargo en el que permanece hasta septiembre de 2013 cuando es nombrado por el Senado como presidente del IFT.
Niegan que sea una cuota política
Entre los expertos en el sector de las telecomunicaciones, Contreras es desconocido, lo mencionan como un técnico sin experiencia en el área. A siete meses de su llegada a la presidencia del IFT, dicen los especialistas, ha tomado decisiones importantes referentes a los intereses de Slim y Azcárraga.
Mientras que algunos legisladores perredistas aseguraron que parte de las negociaciones entre panistas y priístas, en el marco de las reformas en materia política y energética, incluyeron que los de Acción Nacional nombrarían al presidente del IFT a cambio del apoyo azul a las reformas priístas.
Esas declaraciones fueron negadas por el senador panista Roberto Gil al señalar que Contreras “por sus méritos, sus aptitudes, su competencia y por la confianza que generó entre las distintas fuerzas parlamentarias. No es una cuota ni cambio de nada”.
Agregó que “conocí de su trayectoria y de su profesionalismo, de su habilidad y pericia jurídica cuando estuvo en la Consejería del Ejecutivo. Lo conozco de manera indirecta por el ITAM”, dijo.
Para Gabriel Sosa Plata, especialista en telecomunicaciones de la Universidad Autónoma Metropolitana, Contreras en un técnico del Derecho sin experiencia en la toma de decisiones políticas.
“IFT es un órgano técnico y político donde hay que tomar decisiones políticas en contra de dos grandes empresarios que tienen el monopolio de las telecomunicaciones. Sus declaraciones al respecto demuestran un signo de debilidad por su falta de contundencia”, dijo.
La diputada del PRD y especialista en telecomunicaciones, Purificación Carpinteyro, sostuvo que está consciente de que Contreras está sujeto a presiones por parte del Ejecutivo, partidos y poderes fácticos (Televisa y América Móvil), y que está dispuesto aguantar, “según me ha comentado él mismo”.
“No se necesitan gallos sino gallinas porque son las que ponen los huevos. Se requiere es gente que esté dispuesta a enfrentar los intereses que hay en el sector”, señaló.
Irene Levy, presidenta de Observatel y experta en telecomunicaciones, dijo que en el sector nadie lo conoce, pero “tiene un buen trato político, aunque no tenga el mejor perfil, además de que su cercanía con el Poder Ejecutivo puede ayudar a mantener acuerdos”.
LA CARRERA DEL TEJEDOR
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