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En medio de la discusión de la propuesta de reforma energética del presidente Enrique Peña Nieto, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) entregó a diputados federales un documento sobre el estado que guarda la empresa.

En él se revela que la paraestatal está perdiendo cinco mil 600 millones de pesos anuales por distintos problemas sociales.

Estos problemas van desde la imposibilidad de poder llevar a cabo las tomas de lectura en medidores porque los trabajadores son agredidos; asentamientos humanos irregulares en donde tampoco se puede realizar las mediciones y en zonas —sobre todo del Valle de México— en donde radican los ex trabajadores de Luz y Fuerza, entre los más importantes.

Otros cinco mil 600 millones de pesos no son facturados por la paraestatal debido a ilícitos como el robo de energía, “diablitos” y embestidas al sistema (colgado a los cables de la CFE).

Y, cinco mil 600 millones más corresponden a pérdidas provocadas por la obsolescencia de los equipos. Los datos referidos abarcan de enero a diciembre de 2012.

Diferencia de 100%

El documento señala que, en comparación con Estados Unidos, quien tiene un promedio de 7% de pérdida de energía entregada al consumidor, México llega al 14.78%, lo que representa el doble y que no llega al consumidor final.

Este porcentaje representa pérdidas económicas para la empresa del orden de 34 mil millones de pesos, señala el documento.

De esa cantidad, el 50% (17 mil millones de pesos), corresponden a las llamadas pérdidas “no técnicas”, es decir, las que se presentan en el proceso de generación y transmisión. Los otros 17 mil millones corresponden a los tres factores ya señalados: obsolescencia de equipos, ilícitos (robo de energía) y problemas sociales.

La CFE también identificó los puntos del país donde persisten los problema sociales, y dio a conocer que el Valle de México es la zona geográfica donde se detectan más pérdidas de energía eléctrica entregada, por lo que consideró pertinente llevar a cabo acciones que ayuden a contrarrestar esta problemática que la aqueja.

Plan de acción

En ese sentido, propusieron a integrantes de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados seis acciones para aminorar esta problemática que impacta negativamente en la recaudación económica de esta empresa pública.

En este caso, la paraestatal urgió la necesidad de establecer programas masivos de ahorro de energía, principalmente en sectores de bajos recursos económicos, intentando desalentar el robo de energía (instalación de “diablitos”), pues es uno de los principales métodos para una baja facturación.

Respecto a los problemas técnicos que se dan por esta pérdida de energía, se propusieron programas y acciones que detecten y atiendan oportunamente las anomalías reportadas en el suministro, así como la mejora en la infraestructura eléctrica e instalaciones.

La CFE sostiene que es necesario concluir con el proceso de modernización y reubicación de medidores dentro y fuera del Valle de México. Recordó que desde 2009 se inició la sustitución medidores para usuarios domésticos y comerciales e informó que actualmente hay nueve millones ya instalados.

De acuerdo con el documento entregado a diputados federales en una reunión en el Museo Tecnológico, la CFE reportó que alcanzó el territorio del país una cobertura del 98.11%. Este total representa 99.3% de cobertura en la zona urbana y 94% en la rural.

La Comisión Federal de Electricidad explicó que falta electrificar a 42 mil 945 comunidades del país, que representan 2.2 millones de habitantes. Asimismo, la CFE reporta que tiene una cartera vencida de 46 mil 300 millones de pesos.

El 46.4% de los consumidores morosos se concentra en la zona centro del país, el 23% en el sureste y el 17% están concentrados en las zonas del sector rural.