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La reforma energética que presentará el presidente Enrique Peña Nieto al Congreso de la Unión incluye cambios a la Constitución para permitir la entrada de capital privado y cambios en su régimen fiscal, con el propósito de homologarlo al de un corporativo.

La propuesta del presidente Peña Nieto contemplará modificaciones constitucionales a los artículos 25, 27 y 28, incluyendo sus leyes reglamentarias, pero con el ofrecimiento a la izquierda de no alterar el fraseo sobre que el Estado no renuncia ni cede la rectoría sobre Pemex.

Según datos recabados, en los lineamientos se incluye impulsar al sector energético como motor del crecimiento económico, y garantizar su sustentabilidad y seguridad en cuanto al abasto de energía.

Además, se prevé abrir Pemex a la generación de energía renovable y tecnologías limpias, y ampliar las facultades y fortalecer al Órgano Regulador (Comisión Nacional de Hidrocarburos), así como lineamientos de transparencia.

Ayer, el presidente Peña Nieto adelantó que la reforma energética que presentará la próxima semana al Congreso buscará también que las pequeñas, medianas y las grandes empresas del país tengan acceso adecuado al suministro de energía eléctrica, a precios accesibles y competitivos internacionalmente.

En su primer acto público, luego de que fue operado el miércoles de la semana pasada, el mandatario inauguró la Semana del Emprendedor, donde anunció además que en la reforma hacendaria que enviará al Congreso de la Unión incluirá una verdadera simplificación del régimen fiscal que sin duda, dijo, beneficiará a los emprendedores y a las nuevas empresas.

En una primera instancia, la reforma se presentaría este miércoles, después los líderes de los partidos políticos pidieron conocerla primero para evaluarla y socializarla, a fin de tener consensos dentro del Pacto por México y evitar “imposiciones”.

Dinamismo económico

En el Centro Banamex dijo que a partir de las grandes reformas que ha impulsado su gobierno —como la de telecomunicaciones, avalada, y la financiera, en análisis en el Congreso— se crea un nuevo entorno en favor del emprendimiento, la competencia, la formalidad y la productividad.

En la medida en que las empresas crezcan, México tendrá un mercado interno más dinámico y una economía más sólida.

“La reforma energética que habré de presentar en el curso de esta misma semana buscará que las empresas del país, micro, pequeñas, medianas y grandes empresas tengan acceso adecuado al suministro de energía eléctrica a precios competitivos internacionalmente”, dijo el mandatario en el evento, aunque después la Presidencia retiró la frase “en el curso de esta misma semana”, de la versión estenográfica.

Lo anterior, debido a que no hay certeza de que la reforma sea presentada esta misma semana.

Proponen cambiar la Constitución

El presidente de la Comisión de Energía, el priísta David Penchyna, adelantó que la iniciativa de reforma energética contendrá tres o cuatro modificaciones a la Constitución y pretende incluir a la iniciativa privada en distintos sectores de la cadena energética.

En entrevista, Penchyna Grub aseguró que la propuesta será integral y pretende terminar con el monopolio en el sector que ha ejercido Petróleos Mexicanos.

“Si le apostamos a la competencia, lo que necesitamos es precisamente eso, competencia entre diferentes sectores para maximizar la renta, para que las regalías y la utilidad que todos los mexicanos debemos tener de nuestra industria —que ese es el concepto— sea el mejor de todos”, afirmó el legislador priísta.

Certidumbre jurídica

Dijo que la propuesta presidencial busca demostrar que manteniendo la propiedad pública de los energéticos y la rectoría del Estado mexicano se puede combinar capital público y privado.

“Hay certidumbre jurídica de reglas del juego, vamos a demostrar que manteniendo la propiedad pública sobre los recursos energéticos y la rectoría económica del Estado mexicano sobre de ellos, se puede combinar capital público y privado.

Afirmó que se buscará proteger los derechos de los trabajadores, porque lo más valioso que tiene la paraestatal son sus empleados y en relación de esto, tendrá que ser una relación “virtuosa, limpia, transparente y regular entre una empresa y su sindicato”.

El priísta comentó que al ser una reforma integral, le apuesta no solamente a los hidrocarburos, sino “también hace una propuesta que transforme y genere mejores condiciones del sector eléctrico de nuestro país”, dijo.

Abren debate sobre IP

En Londres, el 18 de junio pasado, el presidente Enrique Peña Nieto informó que su gobierno y las distintas fuerzas políticas en el Pacto por México han coincidido en explorar los mecanismos que hagan posible ampliar la capacidad productiva de Pemex a través de la participación del capital privado.

En entrevista al Financial Times, el jefe del Ejecutivo federal manifestó que la reforma energética será trascendental.

El 19 de marzo, el secretario Videgaray se dijo en favor de la participación asociada de la iniciativa privada en el sector, “donde sea necesario”.

En esa misma fecha, el director de Petróleos Mexicanos, Emilio Lozoya, dijo que se requiere permitir alianzas estratégicas para la paraestatal, la cual necesita un nuevo régimen fiscal y transparentar subsidios. Así como fórmulas para compartir el riesgo, pero siempre manteniendo la propiedad pública de los hidrocarburos.

Lozoya Austin informó que esperan que el Congreso de la Unión apoye una reforma energética que se enfoque al marco normativo de la paraestatal, y la flexibilidad presupuestal y operativa.