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El presidente Enrique Peña Nieto sostuvo que la operación que le será prácticada el próximo 31 de julio, para retirarle un quiste de la tiroides, no es peligrosa.

Durante una entrevista ayer a bordo del avión presidencial, el mandatario comentó que el nódulo tiroideo se le había detectado desde hace siete u ocho años, pero que fue posponiendo su atención hasta encontrar el momento oportuno.

“No había tenido la oportunidad, lo venía posponiendo y posponiendo, y creo que ya encontré un buen momento, la recomendación médica de hacerlo y ya programarlo, lo iba a hacer en diciembre, y me ganó el tiempo”, dijo, y añadió no sentir el quiste en su garganta.

Osorio estará pendiente

El presidente de la República comentó que al momento de ser operado el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, “estará muy pendiente” de la agenda nacional. Rechazó que la cirugía sea peligrosa y se le preguntó sobre si habría un encargado de despacho mientras es intervenido quirúrgicamente en el Hospital Central Militar, y respondió de buen humor:

“Yo creo que no, es como si hubiera un encargado las noches que me voy a dormir. Ya lo veremos, ahí vamos a estar, pero seguramente el secretario de Gobernación estará muy pendiente, pero es un sueño muy rápido, un ratito nada más”.

Peña Nieto será sometido a una intervención quirúrgica el próximo miércoles 31 en el Hospital Central Militar de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

Se trata de una operación programada que durará cerca de 90 minutos con el objetivo de retirarle un nódulo tiroideo, dio a conocer el miércoles la Presidencia de la República en un comunicado.

“El Presidente tendrá un periodo de recuperación de cuatro días en la residencia oficial de Los Pinos, durante los cuales atenderá únicamente reuniones de trabajo privadas”, agregó la dependencia.

De acuerdo con el resolutivo RDA 1741/13, la Presidencia de la República y el Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (IFAI), clasificaron como “confidencial” el expediente clínico del presidente Enrique Peña Nieto, por considerar que se trata de un tema de la vida privada.

El 18 de febrero pasado un ciudadano solicitó, vía Infomex, el expediente cínico del mandatario, por “ser de interés público”; pero en un debate en el IFAI, se acordó mantenerlo confidencial sin afectar los lineamientos de transparencia.