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En México, hay estados como Yucatán que tienen niveles de seguridad similares a países desarrollados como Canadá, pero tiene otras regiones con tasas de violencia iguales a las registradas en Honduras o Venezuela.

Roberto Campa Cifrián, subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana de la Secretaría de Gobernación, dijo que en seis años casi se duplicaron los homicidios producto del crimen organizado en el país.

Informó que entre 2000 y 2006 la tasa de homicidios era de 14.1 por cada 100 mil habitantes, “mientras que a partir de 2006 se incrementó hasta llegar a 22 homicidios por cada 100 mil habitantes en 2012”.

Durante la inauguración del encuentro de “Buenas prácticas en prevención de la violencia”, realizado en la Cancillería, el funcionario reconoció que en México se tiene un problema grave de violencia que se ha presentado en los últimos años.

“El punto más alto de esta crisis fue en 2012, cuando se tuvo una tasa de 22 homicidios por cada 100 mil habitantes, lo que nos coloca, según el Observatorio de la Organización de Estados Americanos, más o menos en el lugar 15 de los 34 países medidos”, señaló.

“Apenas un poquito por encima de la media regional, en el mismo lugar que Brasil, que registró una tasa de 21 homicidios por cada 100 mil habitantes”, destacó.

El problema de violencia —consideró— es más grave si lo vemos por regiones, en donde hay estados que se comparan con los mejores promedios del continente, por ejemplo Yucatán, que tiene niveles de seguridad similares a los de Canadá.

Entrevistado al término del evento, con motivo de la Semana de Prevención de la Violencia desde la Salud Pública, al que asisten representantes de 31 países, Campa comentó que hay un programa de prevención de violencia en 57 demarcaciones del país, y en dos delegaciones del DF.

Dijo que se están concluyendo los trabajos para iniciar este programa en el barrio de Tepito, en la Ciudad de México, “y están las zonas metropolitanas de Monterrey, Guadalajara, la Laguna, Acapulco, Chihuahua, Sonora, Michoacán y Tamaulipas”.

Indicó que se ha focalizado el esfuerzo a nivel de colonias, y se han identificado mil 160 donde se genera este fenómeno de violencia.

Desde su análisis, los problemas de violencia e inseguridad no sólo deben ser abordados desde sus efectos, sino del origen y de los factores de riesgo, algunos de los cuales tiene que ver con temas de salud y adicciones.

Sobre los secuestros, el funcionario comentó que es un problema focalizado, perfectamente identificado en regiones donde se ha visto un incremento, y afirmó se está trabajando intensamente para prevenirlo.

Recordó que el secretario de Gobernación y los gobernadores han anunciado una serie de mecanismos con los que, a partir de esquemas de inteligencia e información, se están enfrentando de manera precisa al problema.

Pablo Kuri Morales, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, dijo que la violencia puede detenerse antes de que empiece, a través de la prevención.

Comentó que las lesiones son un problema de salud de alto impacto que debe ser atendido en la agenda global. Cada año, recordó, fallecen unos 6 millones de personas a causa de las lesiones en el mundo, y una cuarta parte es a causa de homicidios y suicidios.

De no tomar medidas al respecto, alertó, para el año 2030 las lesiones a causa de un suicidio u homicidio formarán parte de las 10 principales causas de decesos.

Armando Ahued, secretario de Salud del DF, indicó que los homicidios son la primera causa de muerte entre jóvenes de 15 a 29 años.

Las agresiones, dijo, están asociadas a la violencia interpersonal, intrafamiliar y colectiva, y detonan en suicidios, siendo la tercera causa de muerte entre jóvenes de 15 a 24 años.

En la ceremonia participó Maureen Birmingham, representante de la OPS/OMS en México.