Tlaquiltenango, situado al sur del estado, se convirtió en el tercer municipio cuyo control en materia de prevención y combate al delito es asumido por la Policía Estatal Mando Único.

La acción fue anunciada este medio día por el encargado de la Secretaría de Seguridad Pública en el estado, Alberto Capella Ibarra, luego de que el edil Mauricio Rodríguez González admitió su incapacidad económica para financiar la práctica de exámenes de control y confianza, compra de uniformes, pago y aumento de salarios, así como compra de armas y vehículos oficiales.

Con Tlaquiltenango van tres de los 33 municipios del estado en donde el Mando Único asume el control de la seguridad pública.

La semana pasada fue Yautepec donde el desarrollo del delito de secuestro motivó sendas protestas ciudadanas; luego fue Amacuzac donde el edil Noe Reynoso acusó de la participación de su tío, el diputado del Partido del Trabajo, Alfonso Miranda Gallegos, como uno de los principales instigadores de la desestabilización social en Amacuzac, municipio limítrofe con el estado de Guerrero.

En Tlaquiltenango, el encargado de despacho dijo que su intervención obedeció a la presunción de que los elementos policiales estaban vinculados con el crimen organizado.



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