Familiares y amigos que se concentran en la casa de la familia Tamayo están a la expectativa de una llamada que les de una buena noticia sobre la situación de Édgar Tamayo cuya sentencia de muerte podría ejecutarse hoy.

"Tenemos hasta las 12 de la noche para seguir para recibir una buena noticia, así que por favor sigan ayudándonos con sus oraciones para que Dios les toque los corazones y no ejecuten a Édgar", les suplicó a los vecinos que se encuentran en el domicilio de la calle Cuauhtémoc, la prima del sentenciado, Edelmira Arias Carreño.

A fuera con velas en las manos más de 30 personas aguardan, mientras que en el interior continúan los rezos en medio de los cuales dicen en coro: "¡Sálvalo Señor!, ¡Sálvalo!". Ahí mismo América Tamayo, sobrina de Édgar junto al teléfono está alerta de cualquier llamada, esperando que sea la de su padre Omar, quien es hermano del sentenciado.

Los familiares insisten en que confían que la ejecución se desvanezca.

vms