"No somos delincuentes, queremos vivir en tranquilidad", afirmaron algunas de las cien familias que se refugiaron en el territorio colimense al ser perseguidos y amenazados por parte de policías comunitarias, narcotraficantes y seudo líderes de la comunidad indígena de San Miguel Aquila, Michoacán, comunidad donde impera "la inseguridad y la violencia"

Estas familias indígenas abandonaron, en medio de la inseguridad, sus casas, terrenos, propiedades y pertenencias, por temor a la violencia generada por grupos diversos de "hombres armados con rifles y pistolas, encapuchados. Aquila en la actualidad es tierra de nadie, donde ni las autoridades federales se atreven a entrar", comentan.

Muchas de estas familias indígenas se trasladaron a la comunidad de El Chanal, municipio de Colima, a 15 kilómetros de la capital del Estado. En una sola vivienda se encuentran hacinadas, en un campamento de casas de campaña.

Piden no ser calificados "como delincuentes" y solicitaron el apoyo del Gobierno del Estado de Colima "para sobrevivir" junto con sus familias mientras que se soluciona la violencia e inseguridad en su pueblo.

Estas cien familias "desplazadas", "refugiadas", entre ellos 150 niños, se han instalado en campamentos improvisados en las comunidades de El Chanal, Colima, y Cerro de Ortega, Tecomán, además a los municipios de Armería, y Villa de Álvarez.

Solicitaron al gobernador apoyo para que los más de 150 niños continúen estudiando, pero solicitaron de igual forma se les presten los servicios mínimos de salud, pero también y en la medida de las posibilidades del gobierno alimentación y un techo donde dormir, pues de momento no cuenta con ingresos, ya que en su huida de San Miguel Aquila, Michoacán, abandonaron empleos, tierras, cultivos, animales y demás bienes.

"Está lloviendo y dormimos en casas de campaña, hay puro lodo. Por eso queremos que nos ayude con colchonetas y despensas, que es lo más indispensable", mencionó Jesús Ramírez, uno de los desplazados.

Culpan de la situación que se vive en Aquila a una persona que se llama Agustín Villanueva Ramírez y a "un grupo de encapuchados armados".

Denuncian: "a varios de nosotros nos ha robado y amenazado, nos ha quitado carros, y el motivo no lo sabemos, nada más que esta persona no quiere rendir cuentas; a varios de nosotros nos debe un dinero, unas regalías por la explotación de una mina por parte de la empresa Ternium, varios miles de pesos, es por eso que él quiere ganar, corriéndonos de nuestro pueblo. Nos dijo, junto con los encapuchados, que nos fuéramos, porque si no, nos iba a pesar".

Desean que la situación de su pueblo, Aquila, sea resuelta a la brevedad por las autoridades michoacanas y por el Gobierno Federal y que regrese la seguridad, la calma y la tranquilidad para poder regresar a su tierra, a sus casas y pertenencias.

AYUDA HUMANITARIA

Ante esta situación, y por instrucciones del Gobernador Mario Anguiano Moreno, personal de la Secretaría de Desarrollo Social del Estado llevó este día despensas a estas familias "refugiadas en su campamento" de El Chanal.

El titular de esta dependencia, Rigoberto Salazar Velasco, aseguró que mientras las personas afectadas por la inseguridad del vecino estado permanezcan en la entidad, también se les dotará de ropa y calzado.

Ante el funcionario estatal, los indígenas desplazados le manifestaron su temor de que pudieran venir al estado de Colima la denominada policía comunitaria para agredirlos por exponer la situación que vive el municipio de Aquila, Michoacán.

"Pedimos seguridad al estado de Colima, no somos gente de mal ni delincuentes, sólo estamos huyendo porque nuestro pueblo está secuestrado", expresaron.

El secretario de Desarrollo Social informó que se levantará un censo de las familias desplazadas en Colima para ubicarlas en el estado, esto con el fin de poder llevar los apoyos que requieren para subsistir.

El Gobernador Anguiano Moreno se comprometió, por su parte, a realizar todo el esfuerzo para que los más de 150 infantes de Aquila que se encuentran refugiados en la entidad puedan acceder a planteles educativos, en tanto se solucionan los problemas en su comunidad.

Confío el mandatario en que los problemas que existen en esa región y en todo Michoacán pueda ser solucionado en breve por el Gobierno vecino y por el Gobierno Federal.