Kardashian y West se casarán en un castillo medieval
Polémica. El alquiler de la Fortaleza Belvedere -un castillo del siglo XVI construido por los Medicis- por 360 mil euros (que se invertirán en la restauración del edificio) causan molestia entre algunos vecinos, que consideran irrisoria tal cantidad "teniendo en cuenta la molestia que se ocasiona a la población" por el enlace.. (Foto: El Mercurio/Chile/GDA )
El rapero norteamericano Kanye West y la estrella del reality Kim Kardashian llegaron el sábado discretamente a Florencia, según constataron periodistas, donde han organizado una fiesta en un castillo medieval para celebrar su enlace.
El jet privado de la pareja llegó sobre las 11:40 horas a la capital toscana ante la atenta mirada de una decena de fanáticos.
Venían de Francia donde han hecho una fiesta con trajes de época en el castillo de Versalles y nada más bajar del avión han sido escoltados para huir de las cámaras fotográficas.
Varias azafatas vestidas muy elegantes en trajes negros han recibido a los invitados y los han ido distribuyendo en vehículos para llevarles a sus respectivos hoteles.
Entre los afortunados asistentes se ha podido reconocer a la redactora jefe de Vogue Italia, Franca Sozzani, y personalidades del mundo de la música y de la televisión.
"No se casa uno de tus mejores amigos todos los días", dijo uno de los invitados a la fiesta, prevista esta noche en la Fortaleza Belvedere, un castillo del siglo XVI construido por los Medicis.
El alquiler del espacio, que normalmente se utiliza para exposiciones, situado en la colina Boboli, ha levantado mucha polémica en la ciudad.
Las autoridades aseguran que prácticamente la totalidad de los 360 mil euros que ha pagado la pareja se invertirán en la restauración del edificio.
Pero para algunos vecinos como Jean-Jacques y Diego, que viven cerca del lugar, esta cantidad es irrisoria "teniendo en cuenta la molestia que se ocasiona a la población". Diego se queja de "una invasión hollywoodense de gente con un estilo que no tiene nada que ver con los florentinos", considerados en Italia como un ejemplo de distinción.
Según una fuente del ayuntamiento de Florencia durante la velada un cura protestante iba a oficiar la unión religiosa de la pareja.
Para Marco Agnoletti, portavoz del ayuntamiento, no será una boda oficial ante la ley italiana ya que "no está en los registros".
La prensa del corazón asegura que la pareja ya se dio el "sí quiero" civil a principios de mayo en California.
Se estima que la pareja ganará hasta 21 millones de dólares con estas pomposas fiestas europeas gracias a los patrocinadores y a la venta de imágenes exclusivas.
sc