Charlie Sheen, conocido por sus adicciones a las drogas y el alcohol, parece no dejar las viejas adicciones y fue filmado en un estado lamentable por un fan en un local de comida rápida.

En la grabación se aprecia a Sheen acercarse alegremente al vehículo desde el cual es filmado, caminando con dificultad y con el polo aparentemente roto. El actor comienza el diálogo disculpándose por su estado. "Perdón, pero estoy destruido", confiesa.

Tras un corto saludo, el chofer le pide enseñarle su tatuaje. "¿Cuál de ellos", responde Sheen estirando su polo para poder enseñar el tatuaje en el pecho y luego mostrar uno en el brazo, bajo la mirada de su guardaespaldas.

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