Sasha, Benny y Erick "desnudaron" y se "desnudaron" ante los cancunenses reunidos anoche para escuchar sus canciones en la Plaza de Toros de la ciudad, como parte de su gira "Primera Fila", titulo del disco que promocionan por toda la República Mexicana.

Eran las 22.15 horas y más de cuatro mil personas. Sasha y Erick vestidos de blanco. Benny, de azul. Los músicos, un escenario circular, la plaza casi a tope y el calor del Caribe. La energía contenida en espera a liberarse, tanto como la nostalgia de quienes les han seguido desde que formaban parte de un grupo y después en solitario.

En voz de Sasha, el trío abrió el concierto con la canción "Tonto Corazón", el sencillo que dio a conocer a Benny como solista a principios de los 90's.

"Estamos dispuestos a entregarlo todo. Esta noche nos vamos a desnudar y cuando estemos todos desnudos nos voltearemos a ver (...) haremos el acto más maravilloso de amor", ofrecía e invitaba el cantante, al saludar a los asistentes.

"No me extraña nada", la canción con la que Sasha se lanzó como solista a finales de los 80's, se escuchaba en la voz de Benny, mientras ella se desplazaba por el escenario, a veces como gacela, otras como sensual sombra.

Tocó el turno a Erick, quien provocó suspiros al plantarse con "Cuando mueres por alguien", canción con la que también se lanzó en solitario luego de separarse de Timbiriche.

Luego vino la canción inédita que forma parte del disco y de la gira que los hizo visitar Chetumal, a finales de marzo, también en Quintana Roo.

"Cada beso" pertenece a las nuevas generaciones y se distancia, al menos en tiempo y época, a "Rueda mi mente", "Cielo" o "Dame amor", éxitos individuales de los tres que sobre el escenario, hicieron un puente entre el pasado y el presente.

Previo al homenaje al grupo Soda Estéreo, que incluyeron dentro de su repertorio, con canciones como "Persiana Americana" y "Cuando pase el temblor", Sasha interpretó uno de sus éxitos más celebrados: "Serás el aire".

Después de un medley con canciones de Timbiriche -desde "El baile del sapo" hasta "Si no es ahora"- cantaron un clásico del grupo Presuntos Implicados: "Cómo hemos cambiado", mientras se observaba en la base del escenario una serie de fotografías que se remontaban a su infancia, dentro de la agrupación y ya como jóvenes solistas.

Para delicia de sus fans, Erick interpretó "Princesa Tibetana", momento que fue de los más aplaudidos por los asistentes.

También cantaron "El amor después del amor", del músico y cantautor Fito Páez, momento para el cuando Sasha había cambiado ya dos veces de vestuario, esta vez luciendo una blusa dorada y una minifalda planteada.

El reloj marcaba las 23.30 horas cuando los tres se despidieron. Apenas una hora de concierto y las luces se apagaron. La voz de los cancunenses, quienes pidieron el regreso de los artistas, tuvo eco y volvieron a escena.

"Sin ti", de los grandes temas dentro de la cartera musical de Benny, fue la elegida. Le siguió "Con todos menos conmigo", éxito timbiriche y "Dame amor", con un toque setentero.

El concierto llegó hasta ahí, hasta la medianoche, pero la nostalgia prosiguió entre los pasillos, en donde el comentario fue la deficiente acústica, la baja calidad del sonido, la sorpresa ante la plaza a tope, la grata respuesta de un público -el cancunense-, que pocas veces suele volcarse ante el artista como anoche; la belleza de Sasha, el talento de Benny, el atractivo de Erick y la suma de los tres, generando una intensa emoción entre pasado y presente. Un puente.

sc