La cadena de televisión por cable TBS transmitió anoche un histórico episodio del popular programa "Late Night with Conan O'Brien", uno de los más reconocidos en la televisión de Estados Unidos, que fue grabado en febrero de este año en Cuba.

El popular humorista estadounidense Conan O'Brien, presentador del show, viajó a Cuba el mes pasado para grabar el programa, que se convirtió en el primero de este tipo realizado en la isla.

De acuerdo con el diario El País, desde que Jack Paar, uno de los primeros presentadores el clásico programa de las noches de EU 'The Tonight Show', se trasladó a Cuba en 1959 para entrevistar a un entonces joven Fidel Castro, ningún presentador de los abundantes shows nocturnos de la TV norteamericana había vuelto a grabar en la isla.

Fiel a su estilo, el comediante Conan O'Brien llegó con el objetivo de ser él mismo el objeto de las risas y burlas de los cubanos que lo miraban, entre asombrados y horrorizados, pasearse por su capital para indagar sobre los estereotipos de la isla, señala El País.

El presentador tocó con una banda de salsa cubana y se inscribió a clases de baile para aprender salsa y "rrrrumba", como decía con su fuerte acento.

También intentó, aunque sin éxito, aprender algo de español y visitó el Museo del Ron en el que se "emborrachó" ante la avergonzada mirada de la joven empleada que trataba de explicarle los distintos tipos de licor.

En los cuatro días que duró la grabación, O'Brien también visitó una fábrica de puros, bebió mojitos, y paseó en un auto clásico estadounidense por el famoso Malecón, el paseo marítimo de La Habana.

A pesar de la importancia histórica y política de la grabación de este programa, O'Brien hizo pocas menciones a la situación política de la isla. El comediante había dejado claro que su intención no era más que "hablar con los cubanos y tratar de conocerlos" mejor.

"No quería adoptar un tono mordaz. Y no quería ser político. Quería ir como un comediante que se ríe de sí mismo y hace reír a los cubanos", declaró a los medios momentos antes de la emisión del capítulo.

Sin embargo, O'Brien no pudo evitar momentos de seriedad y aludió al cambio político experimentado desde que el pasado 17 de diciembre, los presidentes de EU, Barack Obama, y de Cuba, Raúl Castro, anunciaron un histórico acuerdo para normalizar las relaciones bilaterales, rotas desde hace casi 50 años.

Delegaciones de ambos países se han reunido tanto en Washington como en La Habana para analizar y establecer las medidas para lograr el deshielo diplomático. Algunas medidas turísticas, comerciales y bancarias ya han sido alcanzadas, y se espera que se logre reabrir la embajada estadounidense en Cuba para el mes de abril.

Sin embargo, aún restan algunos de los puntos más relevantes en la lastimada relación entre ambos países, como la exclusión de Cuba de la lista de países que apoyan actividades terroristas y el levantamiento completo del embargo comercial que pesa sobre la isla.

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