Un reporte sobre las torturas aplicadas por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) estadunidense a sospechosos de terrorismo, que el Senado dará a conocer esta semana, causaría muerte y violencia, según legisladores y exfuncionarios.

"Nuestros socios extranjeros nos han dicho que esto va a provocar muerte y violencia. Nuestros propios servicios de inteligencia así lo han evaluado también" , dijo el republicano Mike Rogers, presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes.

El reporte del Comité de Inteligencia del Senado contiene una dura crítica a la CIA, al indicar que en algunas instancias, operó fuera de la ley con este programa, y mintió para ocultar su existencia.

Para Rogers, la difusión del reporte en estos términos "es una mala idea" , pues sería utilizado por "grupos extremistas islámicos" para incitar a la violencia contra Estados Unidos.

Entrevistado por la televisora CNN, Rogers subrayó que el gobierno del presidente Barack Obama intercedió ante el panel senatorial para que reconsidere su difusión.

El secretario de Estado John Kerry, dijo, "cree que (presentar el informe) es peligroso. Lo que revela que es algo más que diferencias sobre lo que ocurrió, y uno tiene que preguntarse cuál será el beneficio" .

El reporte de 480 páginas refiere más de seis mil documentos de inteligencia que fueron revisados por los investigadores del comité y que se mantienen como clasificados.

Aunque el reporte no identifica a los países que han colaborado con Estados Unidos, el exdirector de la CIA Michael Hayden dijo que su difusión tendrá efectos negativos en la cooperación internacional.

Entrevistado por separado en el programa "Face the Nation" de la cadena CBS, Hayden recordó que existen países que toman riesgos políticos al cooperar con Estados Unidos.

"No puedo imaginar que haya alguien en el futuro que quiera seguir adelante, que esté dispuesto a hacer cualquier cosa con nosotros si vamos a ponerlos en riesgo" , dijo.

Hayden consideró que la difusión del reporte equivaldrá a un juicio sumario a la CIA, y aunque reconoció que el programa de torturas adoleció de fallas, la información obtenida con las llamadas "técnicas mejoradas" de interrogatorio tuvo enorme valor operativo.

Las torturas utilizadas por la CIA y denominadas con ese eufemismo incluían impedir que los reos durmieran, mantenerlos por horas en posiciones incómodas, o sumergir en agua a prisioneros encapuchados para hacerlos sentir que iban a ahogarse.

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