Afganistán declaró el lunes al ex funcionario del Banco Mundial Ashraf Ghani ganador de la segunda vuelta de la elección presidencial del mes pasado, en base a resultados preliminares que amenazan con dividir al país con conflictos étnicos.

La Comisión Electoral Independiente de Afganistán dijo que Ghani ganó la segunda ronda electoral del 14 de junio con el 56.44% de los votos, según los resultados preliminares. Los números podrían cambiar, sin embargo, cuando las cifras oficiales finales se conozcan el 22 de julio.

No hubo una reacción inmediata del rival de Ghani, Abdullah Abdullah, un ex combatiente de la resistencia contra los talibanes que denunció un fraude masivo en la votación e insistió en que los resultados debían demorarse hasta que todos los votos fraudulentos fueran descartados.

Una disputa sangrienta entre grupos étnicos o incluso la secesión de partes del país podrían ocurrir si Abdullah rechazara los resultados.

"El anuncio de los resultados preliminares no significa que el candidato que lleva la delantera sea el ganador y es posible que el resultado pueda cambiar después de que inspeccionemos las quejas" , dijo el jefe de la Comisión Electoral Independiente Yousuf Nuristani a periodistas.

El estancamiento por la votación ha afectado las esperanzas de una transición de poder tranquila en Afganistán, un dolor de cabeza para Occidente puesto que la mayoría de las fuerzas lideradas por Estados Unidos continuarán retirándose del país este año.

El lunes más temprano, los campos rivales intentaron llegar a un compromiso de último minuto para evitar que Afganistán caiga en un largo período de incertidumbre. Nuristani dijo que la comisión había recibido un pedido del campo de Abdullah para revisar las boletas electorales de más de 7 mil centros de votación bajo sospecha de fraude, un número lo suficientemente grande como para alterar el resultado.

"Hoy anunciamos los resultados preliminares y ahora es tarea de la comisión de quejas inspeccionar este caso", sostuvo.

"Estamos preparados para proveer cualquier asistencia hasta el fin del proceso", agregó. La elección buscaba marcar la primera transferencia de poder democrática en la historia de Afganistán, un paso crucial hacia la estabilidad mientras la OTAN se prepara para retirar la mayor parte de sus soldados para fines de año.

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