Al menos 52 miembros del yihadista Estado Islámico (EI) y siete milicianos tribales han muerto en las últimas horas en choques con policías y bombardeos aéreos en la provincia de Saladino, al norte de Bagdad, informaron a Efe fuentes de seguridad.

Diecisiete extremistas perdieron la vida anoche, cuando fuerzas del EI atacaron desde diversos puntos la zona de Al Yabur, en el sur de la ciudad de Al Deluiya, y se enfrentaron con policías y milicianos tribales durante más de dos horas.

Entre los yihadistas muertos figuran un suicida que portaba un cinturón explosivo y otro de nacionalidad saudí.

El ataque del EI a la zona fue acompañado por bombardeos de artillería por parte de los extremistas.

La Jefatura de Operaciones de Seguridad de la ciudad de Samerrá, de la que depende Al Deluiya, informó en un comunicado de que más de veinte yihadistas fallecieron esta anoche en bombardeos aéreos a varios refugios del EI en el este de Al Deluiya.

Otros quince yihadistas fueron abatidos en ataques aéreos iraquíes a posiciones del EI en el este de esa misma ciudad.

El sector norte de Al Deluiya está bajo control del EI, mientras que en la parte sur sus habitantes todavía ofrecen resistencia a los yihadistas, que ya dura 106 días.

Por otro lado, las fuentes explicaron que siete milicianos del clan Al Yabur murieron en unos combates que se reanudaron esta madrugada, sin que los yihadistas lograran avanzar.

Irak mantiene desde junio pasado una cruenta guerra contra el yihadista el EI, que ha proclamado un califato en las zonas de Irak y Siria bajo su control.

Una coalición internacional, liderada por Estados Unidos, respalda a las autoridades iraquíes en su lucha con bombardeos contra las posiciones de los yihadistas tanto en Siria como en Irak.

jram