Al menos 12 iraquíes murieron hoy y otros 25 resultaron heridos en la ciudad de Faluya, al oeste de Bagdad, en bombardeos de artillería lanzados por el Ejército y por la explosión de una bomba en un vehículo que trasladaba a los vecinos que huían.

Una fuente médica del Hospital General de Faluya, en la provincia de mayoría suní de Al Anbar, informó de que once cadáveres fueron trasladados al centro, al que llegaron también veinte heridos.

Estas víctimas se produjeron por los bombardeos que efectúa el Ejército iraquí contra zonas de Faluya en las que supuestamente se esconden terroristas del Estado Islámico de Irak y del Levante (EIIL) .

Al margen de los bombardeos, un civil falleció y cinco resultaron heridos al explotar un artefacto en un vehículo que transportaba a desplazados que huían de los bombardeos, según una fuente policial consultada.

El Ministerio iraquí de Defensa anunció ayer que las Fuerzas Armadas -en colaboración con la policía y combatientes tribales- lanzaron una "operación sorpresiva y amplia" para "limpiar" Faluya de extremistas del EIIL.

En el comienzo de esa nueva operación, al menos 12 civiles perecieron y una treintena resultaron heridos en los bombardeos del ejército con artillería y con proyectiles de mortero.

Al Anbar es escenario desde principios de año de enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y el EIIL, apoyados ambos bandos por combatientes tribales suníes.

Los suníes se quejan de ser discriminados por el Gobierno iraquí, encabezado -aunque ahora de forma interina- por el chií Nuri al Maliki, lo que ha facilitado que los yihadistas se hagan fuertes en algunas áreas de mayoría suní.

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